Una mascota sana, es una mascota feliz que disfruta tu compañía, anda de arriba a abajo, juega, se alimenta adecuadamente y de vez en cuando se apropia de tu sofá para tomar la siesta.
Sin embargo, el comportamiento de un perro, comparado con el de un gato es completamente distinto, mientras tu canino te recibe en casa con un fascinante movimiento de cola y juguetea un rato contigo, los felinos de suerte se acarician entre tus piernas y el recibimiento es un poco más frío.
Una persona cuando está enferma está decaída, sin apetito y con malestar, en esa medida asiste al médico, este le receta de acuerdo con el diagnóstico y listo.
Por el contrario, cuando las mascotas se enferman muchas veces sus dueños no logran percibir que algo anda mal y lo que empezó con síntomas leves, se pueden terminar agravando si pasan desapercibidos.
Las mascotas también sufren enfermedades y aunque convivas con ellos no siempre es fácil detectar algún malestar o dolor. Foto: La Hora/ Alejandro Ramírez
Tus amigos peludos también sufren enfermedades y aunque convivas con ellos no siempre es fácil detectar algún malestar o dolor. Los veterinarios y expertos aseguran que en ese punto es posible observar cada movimiento de la mascota, si hay algún comportamiento anómalo evita el contacto con las personas, es mejor consultarlo con el veterinario de confianza.
Por su parte, Marta Amat, doctora en Veterinaria, jefa del servicio de Etología del Hospital Clínico Veterinario de la Universitat Autónoma de Barcelona (UAB) mencionó en una entrevista que “hace falta conocer algunas claves para entender qué nos quiere decir nuestra mascota”, consideró. Por ello, en LH Bienestar te mostramos algunos puntos que según los expertos son elementales para saber si tu mascota tiene alguna enfermedad.
MENOS ACTIVIDAD FÍSICA
Uno de los primeros síntomas a tener en cuenta es si el gato o el perro reduce, de la noche a la mañana, su nivel de actividad o come menos.
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La apatía, la falta de interés y las pocas ganas de jugar o interaccionar con las personas pueden ser una primera señal de alerta. “Nos debemos fijar en la actividad. Si el animal no sale a recibirnos cuando llegamos a casa, no come o lo hace en menor cantidad, o duerme más horas de lo habitual es un poco sospechoso, y tenemos que empezar a ponernos en alerta”, explica María Pifarré, médico veterinaria.
TEMPERATURA CORPORAL POR ENCIMA DE LO NORMAL
Los expertos explican que los gatos y perros tienen una temperatura distinta a la de los humanos, para ellos lo normal es entre los 38 y 39 grados. Quizá tomar la temperatura de tu mascota no será tarea fácil, pero considera que, si está por encima de 39 grados, es alarmante.
ABUNDANTE SECRECIÓN EN LOS OJOS
La veterinaria dice que los ojos de los animales deben estar “limpios y brillantes”. Asimismo, explica que hay secreciones lagrimales que son normales, siempre que no sean de color verde o amarillo.
“Hay razas más predispuestas a las secreciones lagrimales, como los perros yorkshire o el maltés”, destacó.
PROBLEMAS DE AUDICIÓN
Otro indicativo es que si el animal mantiene la cabeza inclinada o la sacude mucho posiblemente padece de un problema en el sistema auditivo, por eso, los expertos consideran que los dueños se deben acostumbrar al olor de las orejas de sus mascotas, con ello percibirán el mal olor de alguna infección, normalmente llamada otitis.
PROBLEMAS ESTOMACALES
Es normal que los perros y gatos vomiten de vez en cuando, una de las razones es por cambiar el alimento. Sin embargo, hay que ponerle cuidado cuando el gato vomita si ingiere comida e incluso solo bebiendo agua.
“Hay síntomas fáciles de identificar, como los vómitos o las diarreas. Pero si un gato está apático o come menos, no es tan fácil de identificar que existe un problema. Yo siempre recomiendo que ante cualquier cambio o cosa que sorprenda, mejor consultar y trabajar la prevención. No cuesta nada llamar al veterinario y, si no es nada, mucho mejor”, dice Amat.
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A pesar que, la mascota tome abundante agua, es alarmante si este intenta hacer pipí y no puede o expulsa poca cantidad de orina, este es un síndrome o patología como la infección urinaria o los cálculos renales.
“Hay que ir corriendo al veterinario, una obstrucción de la uretra puede ser mortal”, alerta Pifarré.
OTROS FACTORES QUE MERECEN TU ATENCIÓN
Si tu mascota pierde o gana peso en poco tiempo.
Irritable o inquieto.
Se aparta y quiere estar solo.
Cojera, puede ser ocasionada por un problema de artritis.
En el caso del gato, si tiene un aspecto descuidado y se limpia menos su pelaje.
Si tose o estornuda mucho, puede estar derivado de un problema cardiaco.
Los amigos peludos también merecen las mejores atenciones a su salud, ante cualquier eventualidad lo mejor será consultar al veterinario para descartar cualquier enfermedad.
