El presupuesto es una herramienta que registra tus gastos para luego saber dónde se filtra tu dinero. Diseño: La Hora / Alejandro Ramírez

Luis es un ejecutivo de ventas desempleado, recientemente se quedó sin trabajo dado que nuevos directivos asumirán al frente de la empresa y fue necesario un reajuste de personal, laboraba en la empresa desde hace cinco años. Ahora, lleva poco más de ochos meses buscando trabajo y no necesariamente relacionados a las ventas, por lo cual se ha dedicado a algunos trabajos temporales que le han dado un respiro a sus cuentas por pagar.

Por su puesto, Luis cuenta con su indemnización, dinero que percibirá paulatinamente por derecho laboral (artículo 79 del Código de Trabajo de Guatemala)  así también cuenta con unos pocos ahorros en su cuenta bancaria.

Bajo ese contexto, ¿consideras que Luis debe ajustar su bolsillo a su nueva realidad y seguir fomentando el hábito del ahorro a pesar de estar desempleado?

¿QUÉ HARÍAS?

Si tu caso es parecido al de Luis, quizá consideres que te caería bien darte las vacaciones soñadas con el dinero de la indemnización o que es hora de cambiar tu automóvil por uno del año ya que no te había sido posible por cuestiones de liquidez.

En estos casos, los economistas consideran que las ideas anteriores no son las más sensatas, a menos que tu realidad económica sea otra y ese empleo no era tu única fuente de ingresos, es importante tener control del dinero si no puede que ese colchón financiero se esfume.

En esa misma línea enfatizan que el dinero de la indemnización no debe emplearse en caprichos, y aunque quedarse sin empleo viene acompañado de la incertidumbre sobre el futuro y una baja de los ingresos, no debes dejar por un lado el hábito del ahorro, aun así, parezca imposible.

Los expertos en finanzas dicen que será el 30% de tus gastos, el de los deseos, donde debes ajustar tu presupuesto durante el desempleo. Diseño: La Hora / Alejandro Ramírez
Los expertos en finanzas dicen que será el 30% de tus gastos, el de los deseos, donde debes ajustar tu presupuesto durante el desempleo. Diseño: La Hora / Alejandro Ramírez

Las cuentas por pagar no se detienen y no se apiadan de tu condición actual. Probablemente han pasado los días, semanas y meses, se empieza a acabar el dinero que tenías ahorrado, y la liquidación y tus finanzas ya están en cuidados intensivos porque esa oportunidad laboral aún no llega. En LH Bienestar te brindamos algunas recomendaciones para administrar tu dinero en estos momentos de aprietos económicos.

PRESUPUESTO DE EMERGENCIA

El presupuesto es una herramienta que registra tus gastos para luego saber dónde se filtra tu dinero, si no cuentas con uno es hora de poner un presupuesto en marcha.

Este es un presupuesto diferente al habitual, debes considerar en reducir gastos, pero siempre tomando en cuenta que debes apretarte el cinturón y pensar solo en lo indispensable. Recuerda, nada de compras compulsivas.

RECORTE DE GASTOS NO ESENCIALES

Realiza una lista de todas tus fuentes de ingresos actuales (si las hay), así como de lo que tienes disponible en tus cuentas corrientes o de ahorros.

Elabora otra lista de todo en lo que sueles gastar de dinero cada mes.

Divide estos gastos en lo esencial y lo no esencial y planifica dónde vas a recortar tus gastos.

APLICA ESTOS PORCENTAJES

La regla del 50%, 30% y 20% es recomendable para aplicar a la vida financiera y tu bolsillo te lo agradecerá.

El 50% son para los artículos de primera necesidad en los que se consideran los comestibles, arriendo, transporte, servicios públicos.

El 30% está destinado para aficiones, ropa, accesorios, viajes entre otros. Finalmente, el 20% es para planes de ahorro, fondos de emergencia, etc.

Entonces, los expertos en finanzas dicen que será el 30% de tus gastos, el de los deseos, donde debes ajustar tu presupuesto durante el desempleo. Si es absolutamente necesario, también puedes recortar parte del dinero que se destinaría a ahorros, o hacer solo pagos mínimos en sus tarjetas de crédito por el momento.

Recuerda que la etapa abrupta del desempleo es transitoria, por ello es necesario tomar las medidas oportunas a tiempo. Diseño: La Hora / Alejandro Ramírez
Recuerda que la etapa abrupta del desempleo es transitoria, por ello es necesario tomar las medidas oportunas a tiempo. Diseño: La Hora / Alejandro Ramírez
NO CAIGAS EN LA RED DE LAS DEUDAS

No hagas más pesada la carga de tus deudas, y no incrementes tus obligaciones en este tiempo de crisis. En la desesperanza de no saber cuánto tiempo permanecerás sin empleo, si adquieres una deuda esta puede subir y subir hasta volverse impagable.

PUEDES VENDER ALGUNOS BIENES

Si la situación se complica, el tiempo pasa y pasa, las necesidades, deudas y problemas aumentan, una opción puede ser liquidar alguno de tus bienes, pues por el momento necesitas el efectivo para sobrellevar la crisis.

Recuerda que la etapa abrupta del desempleo es transitoria, por ello es necesario tomar las medidas oportunas a tiempo y no demorar en la decisión de ajustar tus gastos de raíz. Respira y mantén el control de tu dinero y sobre todo toma en cuenta los aprendizajes sobre tus finanzas.

Cuéntanos: ¿cómo organizas tus finanzas?

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