BEIRUT
AP
Ataques aéreos contra distritos en poder rebelde en la disputada ciudad siria de Alepo, incluso uno cerca de un hospital, mataron a 15 civiles e hirieron a muchos otros el miércoles, al intensificarse los combates en la mayor ciudad del país, dijeron activistas de la oposición.
Alepo ha registrado un incremento de la violencia en los últimos dos días, con fuerzas del gobierno bombardeando áreas rebeldes en el este de la ciudad dese el aire, al tiempo que insurgentes cañonean distritos occidentales, en poder gubernamental.
Activistas dijeron que algunos de los proyectiles arrojados por aviones del gobierno cayeron cerca del hospital de Bayan, en el barrio de Shaar, bajo control rebelde, con un saldo de 10 muertos. Videos subidos a la internet por activistas muestran una enorme destrucción, incendios y columnas de humo negro elevándose desde edificios.
Heridos eran colocados en ambulancias. Un cadáver cubierto de espeso polvo gris yacía en una calle llena de escombros.
La Asociación de Médicos Independientes, que se describe a sí misma como una organización humanitaria siria que provee atención de salud en la provincia y la ciudad de Alepo, dijo en Twitter que un ataque aéreo destruyó un piso entero de un hospital infantil que administra.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, basado en Gran Bretaña, dijo que 10 civiles murieron en el ataque del miércoles, incluyendo niños. Dijo que proyectiles cayeron en un taller de reparación de motocicletas en una plaza junto al hospital. Otros cinco civiles murieron en ataques en distritos vecinos.
Los Comités de Coordinación Local, una red de activistas, y socorristas voluntarios, dijeron que los ataques causaron múltiples bajas.
Hospitales y otras instalaciones médicas han sido blanco reiterado de ataques durante la guerra civil en Siria, que está ahora en su sexto año. Desde el inicio del conflicto en el 2011, casi 740 médicos y otro personal han muerto en más de 360 ataques contra hospitales en el país, de acuerdo con la agrupación Médicos por los Derechos Humanos.
Médicos Sin Fronteras, a su vez, dijo que al menos 100 miembros del personal, pacientes y otros murieron y 130 resultaron heridos en ataques aéreos y cañoneos contra más de 80 instalaciones de salud mantenidas por la organización en el 2015 y el 2016.
