Los ingresos de Huawei Technologies registraron un aumento en los primeros tres trimestres del año, informó el fabricante chino de equipos de telecomunicaciones el viernes. El incremento se da pese a las sanciones estadounidenses que han perjudicado tanto sus ventas como sus compras de tecnología de punta.
La empresa con sede en Shenzhen indicó el viernes que generó 62.400 millones de dólares en ingresos en los primeros nueve meses del año, un aumento de 2,4% comparado con el mismo período del año anterior.
Huawei, el mayor fabricante de equipos para redes telefónicas y operadores de internet, señaló que su margen neto de ganancias fue del 16%, pero no dio bases de comparación.
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Ken Hu, que ejerce la presidencia rotativa de la empresa, dijo que las cifras “se corresponden con los pronósticos”, y agradeció a los clientes y socios de Huawei por su confianza y apoyo.
“Hacia adelante, seguiremos aumentando nuestra inversión en I+D para aprovechar al máximo nuestra cartera de negocios y elevar la competitividad de nuestros productos y servicios a nuevas alturas”, añadió Hu.
Huawei, que no cotiza en bolsas, tiene problemas desde que el anterior presidente estadounidense Donald Trump lo incluyó en una lista negra de empresas vedadas de hacer negocios con firmas estadounidenses, acusándola de pretender espiar para el gobierno chino. Esa medida bloqueó el acceso de Huawei a semiconductores y otros productos tecnológicos estadounidenses.
Huawei rechaza las acusaciones de que constituye un riesgo de seguridad e insiste que no espía para China.
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La firma, antes una fabricante importante de teléfonos celulares, cayó de los primeros puestos globales desde que perdió el acceso a Google para sus dispositivos.
Desde entonces, ha virado hacia la ayuda a empresas, fábricas y minas que buscan digitalizarse. Es una de las que más gasta en el mundo en investigación y desarrollo, y el año pasado invirtió casi la cuarta parte de sus ingresos globales en I+D. Ha invertido en chips para computadoras, vehículos autónomos y otras tecnologías.
En septiembre, causó revuelo con el lanzamiento de sus teléfonos celulares Mate 60 en China.
El Mate 60 Pro utiliza un chip de punta de fabricación china, con lo cual la empresa ha empezado a superar las sanciones estadounidenses, según los expertos.
