Al menos 17 empleados de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) murieron en la Franja de Gaza desde el inicio de la guerra entre el movimiento islamista Hamás e Israel el 7 de octubre, indicó este sábado su jefe, Philippe Lazzarini.
«Hasta ahora se ha confirmado la muerte de 17 de nuestros compañeros en esta guerra brutal. Por desgracia, la cifra real será probablemente más elevada», escribió el comisario general de la UNRWA en un comunicado.
Algunos «murieron en sus casas mientras dormían con su familia», precisó el responsable de la agencia.
«Insisto en que desde el inicio de la guerra el 7 de octubre, la UNRWA ha facilitado regularmente a todas las partes implicadas la geolocalización de todas sus infraestructuras en la Franja de Gaza. Aun así, al menos 35 edificios fueron alcanzados, algunos por bombardeos directos», lamentó Lazzarini.
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«En la Franja de Gaza, los ataques aéreos y los incesantes bombardeos, añadidos a las órdenes de evacuación de las fuerzas israelíes, han causado el desplazamiento de un millón de personas y provocado la muerte de demasiados civiles», agregó Philippe Lazzarini, que pide un «alto el fuego humanitario urgente».
El responsable de la UNRWA precisó igualmente que las instalaciones de su agencia «están sobrepobladas», con 500.000 personas refugiadas dentro.
La incursión sin precedentes de los milicianos islamistas del movimiento palestino Hamás en suelo israelí, el pasado 7 de octubre, dejó desde entonces más de 1.400 muertos, la mayoría civiles, según las autoridades de Israel.
El ejército israelí mató a unos 1.500 combatientes de Hamás en su contraofensiva, para recuperar el control de las zonas atacadas en el sur del país.
Dentro de la Franja de Gaza, más de 4.100 palestinos, en su mayoría civiles, murieron en los incesantes bombardeos israelíes efectuados en represalia desde el 7 de octubre, según el ministerio de Salud de este territorio gobernado por Hamás.