¿Tu contraseña es realmente segura? Aprende a crear claves seguras y fáciles de recordar

Una de las formas más seguras de proteger tus cuentas (desde el correo electrónico y redes sociales, hasta cuentas bancarias) es creando una contraseña segura. Una contraseña débil puede ser fácilmente adivinada, lo que te expone al robo de datos, hackeos, suplantación de identidad e incluso extorsión.

En un mundo donde los ciberataques, fraudes digitales y robos de identidad son cada vez más comunes, es fundamental comenzar por lo básico: la elección de una buena contraseña. Crear una clave segura es esencial para proteger tu información personal y evitar convertirte en víctima de delitos digitales.

Los hackers suelen aprovechar patrones predecibles en las contraseñas. Muchas veces, la información personal que los usuarios comparten en redes sociales como nombres, fechas importantes, equipos favoritos o lugares frecuentes puede ser utilizada para adivinar contraseñas. Basta con revisar un perfil durante unos minutos para obtener pistas clave.

Además, los ciberdelincuentes emplean programas automatizados que prueban miles de combinaciones hasta lograr acceder a una cuenta. Una vez dentro, pueden suplantar tu identidad y cometer fraudes utilizando tu nombre.

Por eso, es fundamental no compartir información personal en público, evitar abrir correos sospechosos o mensajes desconocidos en redes sociales, y mantener siempre la precaución al navegar.

COMO CREAR UNA CONTRASEÑA SEGURA 

Microsoft ofrece una guía útil para generar contraseñas seguras y difíciles de adivinar. Estas son algunas de sus recomendaciones clave:

Hazla larga
Una contraseña segura debe tener al menos 12 caracteres, aunque mientras más larga sea, mejor. Las contraseñas extensas son más difíciles de descifrar para los atacantes.

Combina caracteres diversos
Usa una mezcla de letras mayúsculas y minúsculas, números y símbolos. Evita secuencias comunes como «1234» o «abcd», y opta por combinaciones menos predecibles.

Evita lo obvio
No uses nombres, apellidos ni palabras comunes del diccionario. Las contraseñas son más seguras cuando contienen palabras poco usuales o inventadas, combinadas con otros caracteres.

Fácil de recordar, difícil de adivinar
Crea una contraseña que tú puedas recordar, pero que sea difícil de deducir para los demás. Por ejemplo, en lugar de “amanecer”, usa una variante como 4M4n3c3R#. Aún mejor si usas palabras o combinaciones que solo tú entiendas y no tengan relación entre sí.

No reutilices contraseñas
Evita usar la misma contraseña en varias cuentas. Puedes utilizar un patrón propio para variarlas en cada sitio y así reforzar la seguridad.

PROTEGE TUS CONTRASEÑAS

Las contraseñas son datos personales clave para tu seguridad digital. Si ya creaste una contraseña segura, estos son los pasos que debes seguir para mantenerla protegida:

No compartas tu contraseña con nadie
Ni con amigos ni familiares. Compartir contraseñas compromete tu seguridad, incluso si confías en la otra persona.

Evita guardar contraseñas en dispositivos ajenos
Si accedes desde un celular o computadora que no es tuya, nunca guardes la contraseña y recuerda cerrar sesión al terminar.

No las envíes por mensajes
Evita compartir contraseñas por correo electrónico, chats, redes sociales o cualquier medio de comunicación. No es seguro.

Usa contraseñas distintas para cada sitio
Si usas la misma contraseña en todas tus cuentas, un solo robo puede comprometer todo. Asegúrate de que cada una sea única.

Utiliza un gestor de contraseñas
Si se te dificulta memorizarlas, puedes usar los administradores de contraseñas integrados en tu celular o computadora.

Cambia tus contraseñas si sospechas actividad inusual
Si notas algo extraño en alguna cuenta, cambia inmediatamente tu contraseña y activa la verificación en dos pasos.

COMO NO OLVIDAR LAS CONTRASEÑAS Y RECORDARLAS 

Cuando se trata de crear una contraseña segura, lo ideal es que sea larga, compleja y contenga una combinación de letras, números y símbolos. Para no olvidarlas, muchas personas optan por anotarlas en un lugar seguro, ya sea en un cuaderno por orden de cuentas, en la aplicación de notas del celular (con contraseña) o guardándolas automáticamente en el navegador.

Además, es fundamental activar la autenticación en dos pasos, una herramienta que añade una capa extra de seguridad a tus cuentas. Asegúrate de que cada cuenta tenga una contraseña distinta, y cuando las actualices, no cambies solo algunos caracteres: modifica la contraseña completamente.

Recuerda hacerlo con regularidad, especialmente en cuentas sensibles como las de banca en línea, gestores de contraseñas, correo electrónico y redes sociales. Así reduces significativamente el riesgo de ser víctima de robo de identidad o ciberataques.