Pese a su “compromiso” por defender la democracia en el país, el presidente, Alejandro Giammattei, ha guardado silencio ante el allanamiento que el Ministerio Público (MP) desarrolló en la sede central del Tribunal Supremo Electora (TSE), y por el secuestro de las actas electorales número 4 y 8, documentos que resguardan la pureza del proceso electoral. Las autoridades electas señalaron que ese hecho “vulnera la democracia” del país.
Giammattei, desde el pasado 29 de septiembre, cuando inició el allanamiento en el TSE, hasta la fecha, no se ha pronunciado por el actuar del órgano investigador, dirigido por la Fiscal General, María Consuelo Porras, a quien ha calificado como «su amiga».
El pasado 28 de junio, ante el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el mandatario reiteró su “inquebrantable” compromiso en la defensa de la democracia, así como los derechos fundamentales de las personas.
“Como jefe de Estado, traigo un mensaje del Congreso de la República, y en nombre de los tres organismos del Estado…, reiteramos el inquebrantable compromiso de mi país y mi gobierno de defender la democracia y garantizar los derechos considerables de todas las personas”, resaltó Giammattei ante el cónclave.
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ARÉVALO SEÑALA «GOLPE DE ESTADO A LA DEMOCRACIA»
El presidente electo, Bernardo Arévalo, dijo que las recientes acciones del MP serían el inicio de un «golpe de Estado a la democracia«, lo cual desvirtúa lo señalado por Giammattei, de respetar la voluntad de la ciudadanía expresada en las urnas. “Una cosa son las elecciones y otra cosa son los procesos de orden judicial”, dijo.
Otra ocasión en la cual el presidente habló de la voluntad popular ocurrió el pasado 11 de septiembre, cuando se entregaron 53 informes de dependencias del Organismo Ejecutivo a la administración entrante. Ese día aseguró que “nada, ni nadie se puede ir en contra de la expresión ciudadana”.
“Yo…, no como presidente, sino como jefe de Estado, le digo que usted, a todos los alcaldes electos y todos los diputados electos, van a tomar posesión el 14 de enero. Nada, ni nadie se puede ir en contra de la expresión ciudadana”, expresó Giammattei.
PROCESO JUDICIAL NO DEBE AFECTAR DEMOCRACIA
Giammattei también profundizó en esa oportunidad en la diferencia que se debe hacer con respecto al proceso electoral y a las acciones judiciales entabladas por el MP: «situación que no debe impedir que nadie asuma el cargo que el pueblo les brindó, en un ejercicio libre y soberano«, y que tampoco se deben afectar los procesos democráticos del país.
«Como jefe de Estado, yo le garanticé hace una semana, y se lo garantizo hoy, va a tomar posesión el 14 de enero. Esa es la decisión del pueblo de Guatemala. Será buena, será mala, eso no importa, es la decisión, y esa decisión se respeta«, dijo el mandatario.
En otra parte de su intervención, el jefe de Estado indicó: “usted va a ser el próximo presidente de Guatemala, le guste o no le guste, eso no importa, sino que importa es que a usted el pueblo lo eligió”, afirmó.
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SIN RESPUESTA DE LA PRESIDENCIA
Ante el desarrollo de las acciones del MP, La Hora buscó la postura del presidente desde el pasado 30 de septiembre, y también para la elaboración de esta nota. Al cierre de esta pieza periodística, como en la anterior consulta, no se obtuvo respuesta.
En las consultas se pidió la postura de Giammattei por el allanamiento que la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI) realizó en la sede central del TSE, de donde se secuestraron las referidas actas electorales.
Asimismo, se consultó sobre «¿Cuál es la postura del Ejecutivo ante el posible inicio de un «Golpe de Estado» en Guatemala?«, ante las declaraciones de las autoridades internacionales y grupos nacionales calificaron este hecho como un «Golpe de Estado a la democracia«; y por último, «¿Cuál es su respuesta al llamado que hizo el presidente electo, Bernardo Arévalo, para que se pronuncie por ‘el ultraje que se está cometiendo en contra de las instituciones democráticas'».
