Luego del anuncio de la suspensión temporal del proceso de transición por parte del presidente electo, Bernardo Arévalo, derivado de los allanamientos que la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI) realiza en instalaciones del Tribunal Supremo Electoral (TSE), la administración de Alejandro Giammattei emitió un comunicado en el cual se aseguró que el Organismo Ejecutivo es ajeno a estas acciones.
En el escrito, el Gobierno indicó que se tomó nota del anuncio por parte del binomio electo, conformado por Arévalo y Karin Herrera, sobre la suspensión temporal del proceso de transición que está en desarrollo.
“Esta es una decisión que respetamos pero no compartimos, pues se realizó derivado de acciones ajenas al Organismo Ejecutivo, que no interfieren en el proceso que se había desarrollado a la fecha”, se indicó.
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Además, el Gobierno reiteró su compromiso de retomar inmediatamente el proceso de transición en el momento en que las autoridades electas lo soliciten.
ARÉVALO ROMPE LAZOS CON GIAMMATTEI
Tras los allanamientos del pasado martes 12 de septiembre, por parte de la FECI, el presidente electo dio a conocer que informó a Giammattei sobre la suspensión temporal de la participación de su equipo en el proceso de transición hasta que se restablezcan las condiciones políticas institucionales necesarias.
En una conferencia de prensa, Arévalo también solicitó la renuncia de la Fiscal General y Jefa del Ministerio Público (MP), María Consuelo Porras; del jefe de la FECI, Rafael Curruchiche; así como el titular del Juzgado Séptimo Penal A, Fredy Orellana.
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Sostiene que los tres señalados serían parte de un proceso de Golpe de Estado, con el cual se busca evitar que asuma la próxima administración de gobierno.
Los tres funcionarios en “asociación perversa” han emprendido una nueva escalada en el Golpe de Estado, el cual inició tras la finalización de la primera vuelta electoral, según expresó Arévalo.
De acuerdo con el presidente electo, la apertura de las cajas electorales busca anular la voluntad popular, así como burlarse del pueblo honesto, ya que las únicas autoridades que pueden verificar el resguardo del material electoral son el TSE y las Juntas Electorales.
Arévalo sostuvo que los tres funcionarios tienen responsabilidad en la violación del proceso electoral y de la democracia, y que con su salida del cargo se permitirá garantizar el orden constitucional.
LOS ALLANAMIENTOS
El pasado martes 12 de septiembre, la FECI, a cargo de Curruchiche, realizó una serie de allanamientos en el Registro de Ciudadanos (RC) del TSE, así como en el Parque de la Industria, lugar en donde abrió las cajas electorales que resguardan los votos de las elecciones generales del pasado 25 de junio, así como la segunda vuelta electoral por la Presidencia.
Las cajas electorales que fueron abiertas tienen relación con la primera ronda de los comicios, según informó el jefe de la FECI.
De acuerdo con el TSE, al abrir las cajas electorales se vulneró la cadena de custodia del voto, y no solamente se encuentra en riesgo el sistema electoral, sino la democracia, su procedimiento, y los derechos cívicos de los ciudadanos guatemaltecos.
“Una vez que la cadena de custodia y el principio de preclusión se ha violado, el TSE no puede garantizar que el contenido de las cajas electorales abiertas sea el mismo con el que se recibieron luego de las elecciones del 25 de junio y 20 de agosto de 2023”, aseguró la entidad electoral.
