En el ojo del huracán está el Organismo Judicial, con los fallos de dos Cámaras de alzada, que, en desconocimiento de la Constitución, han proferido resoluciones que los califican de “INCAPACES”, con total desconocimiento de lo que norma la Constitución, que claramente dice que en autos y sentencias, debe prevalecer el derecho y la certeza jurídica. Resolver con intenciones políticas o de otra índole los coloca en el precipicio de ser serviles y no actuar con las reglas que las leyes de la materia establecen.
La sala 6ª de lo Contencioso Administrativo, resolvió con lugar la acción contra el excandidato presidencial de Prosperidad Ciudadana, Carlos Pineda, los candidatos a diputados y corporaciones edilicias, para no participar en las elecciones del 25 de Junio, con irregularidades en las asambleas de nominación. Tal resolución fue apelada en la CC que declaró sin lugar la acción del interponente y certificó al MP para investigar a los magistrados de dicha Sala y funcionarios electorales que en franca violación a la ley, habían avalado las asambleas de PC.
En otra acción la dirigente del PC Lilian García, promovió un amparo en la sala 5ª de lo Contencioso Administrativo, que en contrario de la sala 6ª resolvió amparar a los aspirantes a 11 Distritos Electorales, como candidatos a diputados e igual número de alcaldes para que participaran en los comicios próximos, que obligó al Registro de Ciudadanos, a impugnar dicho amparo “provisional”. Al resolver la CC certificó lo conducente al MP contra los magistrados de la relacionada Cámara para que se les investiguen del porqué resolvieron a favor del amparista.
Los magistrados de la sala 5ª de lo Contencioso Administrativo sus actuaciones han dado lugar a muchas sospechas. Resolvieron a favor del usurpador rector de la Universidad de San Carlos Walter Mazariegos y a favor del partido FCN.-Nación del polichinela Jimmy Morales, a pesar que se habían comprobado serias irregularidades de dinero ilícito en su campaña por lograr la presidencia. No extraña en absoluto el actuar de los magistrados de dicha Cámara de alzada, especialmente de su presidente Guillermo Demetrio España Mérida, una marioneta del exrector Estuardo Gálvez.
Se espera que el Ministerio Público, asiente un precedente y se lleve a juicio a los magistrados de ambas Cámaras y se les despoje de sus magistraturas. Este proceso electoral como lo hemos dicho en otros espacios, discurre entre una nebulosa de sombras y desconfianza por las resoluciones del Tribunal Supremo Electoral, y los marcados atrasos que pueden surgir en el envío del material electoral al interior de la República. Se anuncian protestas antes y después de los comicios, especialmente de aquellos aspirantes que en clara violación a la Constitución se les vedó el derecho de participar.
Estos comicios han sentado historia de desconfianza y de incredulidad en una buena masa de electores, que hasta ahora no saben por quién votar, al aspirar a la presidencia 25 candidatos que han ofrecido de todo, que ya en el puesto no van a cumplir. El guatemalteco que no está inmerso en este desprestigiado proceso electoral exige que el futuro gobierno no sea corrupto, no se ligue con narcos y que termine con la violencia organizada que a diario cobra vidas, por la incapacidad de las fuerzas de seguridad y de los tribunales.
