Tres hombres acusados de apoyar el terrorismo por coordinarse para secuestrar a la gobernadora de Michigan fueron declarados culpables el miércoles en un juicio enfocado en el adiestramiento paramilitar y desacato agresivo al gobierno antes de la elección presidencial estadounidense de 2020. Joe Morrison, su suegro Pete Musico y Paul Bellar fueron declarados culpables de proveer «apoyo material» a un acto terrorista como miembros de un grupo llamado Wolverine Watchmen.
Realizaban prácticas de tiro en el condado de Jackson con un cabecilla del plan de secuestro, Adam Fox, que decía querer secuestrar a la gobernadora demócrata Gretchen Whitmer. El juicio en la corte estatal fue una derivación del caso principal en un tribunal federal, que declaró culpables a Fox y otros dos hombres por asociación ilícita y absolvió a dos acusados.
En la corte se leyeron y escucharon diatribas violentas contra el gobierno y en apoyo al «boogaloo», una presunta guerra civil que se podría provocar mediante un secuestro espectacular. Los fiscales aseguraron que las restricciones impuestas por Whitmer debido al COVID-19 ayudaron a los Watchmen a reclutar más gente.
Morrison, de 28 años, Musico, de 44 y Bellar, de 24, también fueron declarados culpables de un delito con armas y de ser miembros de una pandilla. Los fiscales dijeron que Wolverine Watchmen era una organización criminal.
Morrison, quien recientemente dio positivo en una prueba de COVID-19 y Musico se mostraron conmocionados al escuchar los veredictos por video fuera de la corte. El juez Thomas Wilson ordenó que los tres permanezcan en la cárcel mientras aguardan la condena el 15 de diciembre.
Los veredictos son «una prueba más de que la violencia y las amenazas no tienen lugar en nuestra política», declaró Whitmer, que no ha sido testigo ni espectadora en los juicios. «Los que tratan de sembrar la discordia mediante complots violentos deberán rendir cuentas ante la ley».
Whitmer, que aspira a la reelección el 8 de noviembre, no sufrió un ataque físico. Agentes clandestinos e informantes infiltraron el grupo de Fox durante meses. El plan fue desbaratado en octubre de 2020 y 14 personas fueron arrestadas. Fox y Barry Croft Jr. fueron condenados por asociación para un secuestro por un tribunal federal en agosto. Daniel Harris y Brandon Caserta fueron absueltos, en tanto Ty Garbin y Kaleb Franks se declararon culpables. En cuanto a los cinco restantes, un juez debe decidir si hay mérito para iniciarles juicio.