Samuel Flores
Sin rutas de acceso alternas a la capital, un invierno cada vez más copioso complica el acceso de comerciantes, viajeros y millares de trabajadores que viven en las denominadas “ciudades dormitorio” para acudir a sus labores diariamente.
Con el derrumbe registrado a inmediaciones del kilómetro 24 de la ruta Interamericana, Mixco; y el creciente agujero ubicado en el 15.5, Villa Nueva, automovilistas, comerciantes, trabajadores y toda clase de viajeros que ingresan a la capital afrontan un calvario. Con 22 fallecidos, 15 puentes destruidos y dañados, más de 128 carreteras afectadas, los guatemaltecos afrontamos una drástica emergencia climática en la historia del país.
Durante casi tres días, más de 147 mil vehículos que circulan por esas importantes vías de acceso, tuvieron que esperar hasta tres horas con un encarecido consumo de combustibles, castigando aún más el bolsillo de los automovilistas.
Ambos incidentes provocados por las intensas lluvias ponen al descubierto la falta de planes de contención del Ministerio de Comunicaciones, y de las municipalidades involucradas. Todos los años en época de invierno se registran derrumbes, inundaciones, socavamientos, de manera individual; sin embargo, en esta ocasión se unen dos emergencias que confluyen desde la costa sur y el occidente del país, complicando el tránsito por esas rutas de ingreso a la metrópoli.
Esta es una realidad conocida por el gobierno y autoridades locales; sin embargo, no han realizado esfuerzos por disminuir esa carencia. La única Vía Alterna del Sur, más conocida como Autopista VAS, es una vía terrestre con sistema de peaje de doble calzada que comunica el sur de Villa Nueva, con Boca del Monte-Villa Canales, y la zona 12 de la capital. Es una ruta privada alterna que representa gastos extra para los automovilistas que van de los Q14 a los Q25 por trayecto. Además, usuarios del servicio de transporte extraurbano sufrieron inconvenientes al abandonar las unidades ante el lento avance por esas rutas.
Por aparte, la ruta San Cristóbal-Mixco; Villa Lobos-Villa Nueva, está congestionada por el deslave que se registró en el kilómetro 24 de la ruta interamericana. Desde Mixco hasta el Trébol, en la capital, las únicas rutas alternas existentes son la Calzada Mateo Flores y la Calzada San Juan, ambas saturadas diariamente por el tráfico cotidiano proveniente de San Raymundo, San Juan y San Pedro Sacatepéquez, hacia el centro de la ciudad.
El Ejecutivo y las autoridades municipales del área metropolitana deben meditar sobre esta situación que azota a los transportistas que ingresan a la capital a fin de evitar que futuras emergencias afecten directamente a millares de transportistas y trabajadores que viven en los municipios que rodean la capital.