Por STEVEN WINE
MIAMI
AP
Carlos Martínez se sobrepuso a un inicio vacilante y a una recta que lo golpeó en hombro de lanzar y que lo dejó tendido de bruces en la caja de bateo.
El dominicano lanzó siete entradas y ayudó a que los Cardenales de San Luis vencieran el martes 4-3 a los Marlins de Miami.
Martínez (8-3) estaba perdiendo por 3-0 después de una entrada y un tercio, pero recuperó el control. Retiró a los últimos siete bateadores que enfrentó, incluidos tres después de ser golpeado por un lanzamiento de 94 millas por hora cuando trababa de realizar un toque de bola en el séptimo episodio.
«En ese momento pensé ‘¡Dios mío, me quebraron el brazo!»’, relató el diestro. «Pero un par de minutos después me sentí bien y dije que estaba listo para lanzar el siguiente inning».
Varios familiares y amigos de Martínez, procedentes de República Dominicana, estaban en el graderío, incluidos algunos que jamás lo habían visto lanzar. En estas circunstancias, el serpentinero dijo que trató de esforzarse más de la cuenta en el comienzo del partido.
«Carlos tenía mucha energía, y a nosotros nos agrada eso», indicó el manager de los Cardenales, Mike Matheny. «Pero estaba teniendo problemas para deslindar eso de la forma en que lanzaba… se serenó y probablemente los últimos tres innings son los mejores que ha tenido».
El derecho ponchó a nueve adversarios y permitió ocho imparables. Recibió un cuadrangular de dos carreras en la primera entrada por parte del líder de jonrones y carreras producidas de Grandes Ligas Giancarlo Stanton.
EN OTROS JUEGOS
Stephen Strasburg regresó tras abandonar la lista de los lesionados. Pintó de blanco a sus rivales en cinco entradas y los Nacionales de Washington derrotaron 3-1 a los Bravos de Atlanta.
El novato dominicano Maikel Franco volvió a conectar un jonrón e impulsó cinco carreras por segunda noche consecutiva, y los Filis de Filadelfia doblegaron 11-6 a los Yanquis de Nueva York.
El venezolano Francisco Cervelli y Andrew McCutchen aportaron sendos jonrones a la victoria de los Piratas de Pittsburgh, por 7-6 sobre los Rojos de Cincinnati.
