Por ALEXANDRA JAFFE, BILL BARROW y WILL WEISSERT
WILMINGTON, Delaware, EE. UU.
Agencia AP
Joe Biden y Kamala Harris dejaron atrás su rivalidad política ayer para lanzar un agresivo ataque conjunto al carácter y el desempeño del presidente Donald Trump durante su presentación como compañeros de fórmula para las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
La presentación física de la boleta demócrata no tuvo comparación en los anales políticos recientes. El coronavirus evitó que Biden y Harris debutaran ante la enorme multitud de simpatizantes que suele recibir al aspirante a la Casa Blanca y a su compañero o compañera de fórmula. En su lugar, hablaron dentro del gimnasio prácticamente vacío de una escuela secundaria, donde casi había más reporteros que asesores de campaña y familiares de los candidatos.
Aunque la pandemia imposibilitó una presentación tradicional, dio a Biden y Harris un escenario único para redoblar sus críticas a Trump como un mandatario incapaz de controlar la peor crisis de salud pública en un siglo. Harris fue particularmente incisiva en su condena al gobierno.
«El caso contra Donald Trump y Mike Pence está cerrado», dijo Harris. «El virus ha tenido un impacto en casi todos los países. Pero existe un motivo por el que ha golpeado a Estados Unidos con más fuerza que a cualquier otra nación desarrollada. Es porque Trump no lo tomó en serio desde el principio».
«Esto es lo que sucede cuando elegimos a una persona que no está capacitada para el trabajo», añadió.
Harris es la primera mujer negra en la boleta presidencial de un partido mayoritario, y ella y Biden destacaron el significado histórico.
«Esta mañana, en todo el país, las niñas despertaron, en especial las negras e hispanas que a menudo se sienten ignoradas y subestimadas en sus comunidades. Pero hoy, hoy, solo tal vez, se ven a sí mismas por primera vez de forma distinta», declaró Biden.
Harris, quien también tiene ascendencia sudasiática, destacó a las «mujeres heroicas y ambiciosas que estuvieron antes de mí, cuyo sacrificio, determinación y fortaleza hicieron posible mi presencia hoy aquí».
Por su parte, Trump ha tenido problemas para lanzar un mensaje coherente sobre la fórmula Biden-Harris, describiendo a los demócratas como una dupla demasiado liberal para el país pero no lo suficientemente progresista para la base de su partido. Trump ha recurrido a críticas racistas y sexistas, refiriéndose a Harris como «repugnante» y tuiteando que la «mujer de familia suburbana votará por mí» para mantener los vecindarios seguros.