POR REDACCIÓN LA HORA
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Mientras Nueva York sufría los peores momentos a causa del COVID-19, José, un migrante guatemalteco radicado desde hace varios años en esa ciudad, enfrentó los efectos de la enfermedad y con el apoyo de consejos de médicos guatemaltecos vía WhatsApp y fe, salió adelante, ahora cuenta su historia y también las dificultades luego de sufrir el virus, en especial, por la falta de empleo estable para ayudar con más remesas a su esposa.
Al comenzar la conversación con La Hora, Don José, recuerda que emprendió varios negocios en Guatemala, sin embargo, enfrentó dificultades debido a la situación de inseguridad en donde vivía, así que decidió migrar, eso en 2004.
Del 27 marzo al 27 de abril, explicó que cayó en cama, pero debido a la situación que se vivía en esas fechas en Nueva York, porque los servicios de salud estaban rebasados por la cifra de casos, decidió permanecer en su apartamento.
El guatemalteco no tiene certeza de cómo contrajo el virus, únicamente recuerda que el último día que fue a trabajar, ya que se dedica a la insulación en construcciones, es decir, colocar fibra de vidrio para aislar térmicamente estructuras y para él debía aplicar esto en una edificación y la máquina que utilizaba para eso falló, por lo parte del líquido que utilizaba caía en su cara, aunque tenía mascarilla, se la quitaba por momentos porque no aguantaba el malestar que le provocaba, sin embargo, reitera que no sabe si eso contribuyó o dónde pudo adquirirlo.
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DECIDIÓ NO ASISTIR A UN SERVICIO DE SALUD
Con el pasar de los días, la construcción se paralizó debido a la emergencia y José, que vive con uno de sus hijos quien tiene síndrome de Down, decidió al presentar síntomas no acudir a un servicio de salud, debido a la situación que se vivía en estos.
El guatemalteco, por medio de otros migrantes, logró hacer contacto con un médico de la Universidad de San Carlos, así como con un padre de Esquipulas, en la red social WhatsApp, quienes le ayudaron a tener ciertos cuidados para soportar los síntomas y mejorar.
“Hubo un momento en el que me hinque en la cama y le pedí a Dios que si era para vivir me quitara la enfermedad y si era para morir que me llevara porque ya no aguantaba”, mencionó.
Además, relató que durante ese tiempo no comía, tenía pesadillas y al pasar 18 días empezó a mejorar “yo me iba a morir, por Dios y mi Santa Madre que me iba a morir, no se lo deseo a nadie”, puntualizó.
DESPUÉS DEL COVID-19, AHORA ENFRENTA DIFICULTADES ECONÓMICAS
Luego de recuperarse comentó que las dificultades han continuado, en especial por la situación económica en Estados Unidos, ya que aún no hay estabilidad en el área en donde se desempeña, así que no ha podido enviar la misma cantidad de remesas para su esposa y familia en Guatemala.
En ese sentido, comentó que su hijo le ha ayudado con lo poco que puede, a la vez, ha realizado algunos trabajos pequeños de construcción en Nueva Jersey.
Asimismo, apeló que en estos casos es necesario que en Guatemala las autoridades prioricen ayudar con los programas sociales a las personas más necesitadas, mientras, personas como él, pueden mejorar sus envíos de ayuda.
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Si usted desea ayudar a José debido a las dificultades que enfrenta, puede escribir a dgamez@lahora.com.gt para establecer una comunicación con el connacional.
Nueva York es una de las ciudades de Estados Unidos que más afectó el COVID-19 y según el sitio, worldometers.info, hasta hoy contabilizan 421 mil 414 y 32 mil 215 muertes, mientras han empezado desde hace varias semanas una reactivación económica por fases. También es una de las ciudades con mayor presencia de guatemaltecos en ese país.