Juan Jacobo Muñoz Lemus

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"Guatemalteco, médico y psiquiatra"

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Juan Jacobo Muñoz

* El eterno retorno, la grandiosidad humana, siempre rondando tan campante.
* Eternidad, el tiempo que nos queda por vivir.
* Cada vez que alguien sufre por un error evitable, un pecado capital sonríe socarronamente, por todo lo que pudo descender de él.  Cada sufrimiento promovido así, es como una historia mitológica.
* Los mitos no son leyendas de cosas falsas que van de generación en generación.  Los mitos son símbolos que debemos comprender para no caer en ellos, al menos no tan fácilmente.
* Que cansado ser esclavo de pasiones. Y el engaño mayor del apasionado, creer que eso lo hace estar vivo.
* El odio no es malo, es natural. Si se sabe reconocer y sentir, hasta se consume.
* Ver más allá de lo evidente y anticipar consecuencias, no es tan complicado. A menos que no se soporte la frustración, y la conducta se convierta en una chapucera y nada más.
* Mucha gente se siente madura porque es capaz de plantar ideas a kilómetros de distancia, incluso a miles. Gente que no cultiva su alma, que a la postre deviene en árida; un páramo extraordinariamente empobrecido.
* Estoy convencido; una mala persona es pusilánime.
* Están las personas que envidian por carencias y los que envidian porque resienten el bien ajeno.
* Conocí a una persona que amaba tanto a Dios, que no tenía necesidad de mencionarlo.
* Que cada uno que dé una lección de vida, la dé con su vida.  Las palabras las puede usar cualquiera, especialmente aquellos que no tienen una vida.
* Estoy en contra de la metamorfosis invertida.
* A veces nos ponemos en el vórtice y otras nos sentimos en el vértice.
* Somos buenos para decir cómo no se hacen las cosas, pero ni idea de saber cómo se hacen.
* Haciendo dramas profundos para vivir, perdemos profundidad para vivir.
* Tanta gente que es un buen ejemplo, de un mal ejemplo.
* Prostitución es corromper una virtud.  Una interacción humana que no es vinculación, como cualquier relación promiscua o utilitaria.
* Lógica perversa. Forma de auto engañarnos y naturalizar la vileza.
* Cuantos somos como zombis. Gente muerta caminando, buscando un ser humano a quien devorar.
* Eso que veo promover con tanto ahínco. ¿Será necesidad o necedad?
* Se vulgariza el ser humano en el camino, y termina siendo chocante, incluso astringente.
* El ser humano es la pauta de un animal que encima piensa.
* El aprecio no es despreciable, pero cuanto se le desprecia.
* Cada fábula deja una moraleja edificante, y muchas vidas, para nada fabulosas, muchas inmoralejas degradantes.
* Nadie se muere de ganas, es más fácil morir, por quitarse las ganas.
* Que cada quien haga lo que le dé la gana, en esencia es su derecho. Pero que no se sorprenda de los resultados y mucho menos, cargue a otros con ellos.
* Que placentero resulta no meterse en lo que a uno no le importa, y no hacer cosas que para hacerlas, haya que esconderse.
* Cualquiera que cree que algo gana, debe saber que al mismo tiempo, también pierde algo. Son los rigores de la ambigüedad, la sempiterna compañera de viaje, en la vida de cualquiera.
* A mí no me molesta la soledad, sino que no me dejen estar solo.
* Demasiada palabrería para cosas inefables. De pronto lo que nos conviene, es atender los consejos de nuestra propia muerte.

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