Moscú
DPA
El francés Blaise Matuidi no ve una ventaja sustancial para su equipo en el hecho de que Croacia haya jugado tres prórrogas y dos tandas de penales en su camino a la final del Mundial de fútbol que ambos países disputarán el domingo en Moscú.
«No es ningún handicap para los croatas», dijo el centrocampista galo en una conferencia de prensa en Istra, cuartel general de los «bleus» en Rusia.
El jugador calificó el duelo en el estadio Luzhniki, en el que Francia busca su segundo título mundial después del logrado en 1998, como «el partido de nuestras vidas».
El «Equipe Tricolore» disputó también la final en 2006, pero entonces cayó derrotado por Italia en penales.
A sus 31 años, Matuidi no está seguro de poder tener otra oportunidad en el próximo Mundial. «Intentaré estar todo lo posible, pero la próxima Copa del Mundo queda lejos», admitió.
