POR MARGARITA GIRÓN
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De acuerdo con la información del Banco de Guatemala (Banguat), en el año 2020 la inflación se ubicó dentro de la meta determinada por la Junta Monetaria, de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), Guatemala acumuló una inflación del 4.82 %, esto, pese a que, en el año se observaron choques de oferta relacionados con factores climáticos y también con la pandemia del COVID-19.
Sergio Recinos, presidente del Banguat, en una entrevista para La Hora explicó que, una inflación baja contribuye a preservar el ingreso de las personas en términos reales y ello, a su vez, propicia un mayor nivel de transacciones en la economía, en apoyo a la actividad económica.
Además, destacó que el objetivo fundamental de esa entidad es mantener una inflación baja y estable, que constituye la mejor contribución que puede hacer para promover el desarrollo ordenado de la economía guatemalteca.
Para este año se prevé un crecimiento del PIB y una evolución favorable respecto a sectores económicos externos; no obstante, es necesario el fortalecimiento de la institucionalidad, así como de la certeza jurídica y reglas claras, así como la contención de la pandemia para materializar las posibilidades de crecimiento y mejoras en el clima de negocios a nivel de país.
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LOS NÚMEROS PARA EL 2021
Según explicó Recinos, para este año, se prevé que el crecimiento del PIB, en términos reales, de acuerdo con las proyecciones, se espera que se ubique en un rango entre 2.5% y 4.5% (con un valor central de 3.5%), como resultado de que a nivel sectorial, todas las actividades económicas registrarían crecimientos positivos, destacando el mayor dinamismo del comercio y reparación de vehículos; las industrias manufactureras; la construcción; las actividades inmobiliarias; la agricultura, ganadería, silvicultura y pesca; las actividades financieras y de seguros; y las otras actividades de servicios.
En el caso de la inflación, Recinos detalló que, se estima que al finalizar 2021 se ubique en 4.50%, dentro de la meta establecida por la Junta Monetaria (4.0% +/- 1 punto porcentual). Dicha proyección es consistente con las expectativas de inflación del panel de analistas privados.
Con relación a los principales agregados monetarios y de crédito, se estima que en 2021 el crecimiento de la emisión monetaria retorne gradualmente a un comportamiento congruente con sus tasas de variación de largo plazo y registre un crecimiento entre 9.5% y 12.5%. Por su parte, el crédito bancario al sector privado tendría un crecimiento entre 6.5% y 9.5%, asociado a la mayor actividad económica prevista.
SECTOR EXTERNO
El Directivo del Banguat, describió que, para las principales variables del sector externo, en 2021 se prevé una evolución favorable de las exportaciones con un crecimiento en un rango entre 7.5% y 10.5%, resultado, como se indicó, de la recuperación de la actividad económica a nivel mundial, particularmente de los Estados Unidos de América.
“También se reflejaría en un crecimiento del ingreso de divisas por remesas familiares en un rango entre 8.5% y 11.5%. Por su parte, las importaciones de bienes registrarían un crecimiento en un rango entre 8.0% y 11.0%”, agregó.
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¿DE QUÉ DEPENDE EL CRECIMIENTO ECONÓMICO DEL PAÍS EN EL 2021?
A decir de Recinos, los principales factores que fundamentan el escenario base de las proyecciones de crecimiento económico para 2021 están asociados, fundamentalmente, a la contención de la pandemia del COVID-19.
“Tanto en Guatemala como a nivel mundial, a la magnitud y duración de las medidas de prevención que se implementen para moderar la propagación de una segunda ola de contagios y a la efectividad en los procesos de vacunación masiva”, aseveró.
Además, indicó que, se prevé la continuación de los estímulos fiscales, en combinación con la orientación acomodaticia de la política monetaria, lo que propiciaría el mantenimiento de condiciones favorables para la actividad económica.
Recinos concluyó destacando que, se prevé una mejora en el desempeño económico de los principales socios comerciales del país, especialmente, de los Estados Unidos de América, lo que se reflejaría en un impulso de la demanda de productos de exportación, del turismo y beneficiaría la demanda interna, mediante el aumento de las remesas familiares.
LOS RETOS DE GUATEMALA RESPECTO AL CLIMA DE NEGOCIOS
De acuerdo con el Presidente del Banguat, el Índice de Confianza de la Actividad Económica (ICAE) a diciembre de 2020 se ubicó en 49.84 puntos, evidenciando una recuperación de la confianza de los agentes económicos, luego de la drástica reducción que se registró entre marzo y abril como consecuencia de la propagación del COVID-19 en el país, lo cual, a decir de Recinos, refleja una mejor percepción con relación al clima de negocios y de inversión que prevalecería en los próximos seis meses.
“Es importante mencionar que Guatemala aún enfrenta retos importantes para mejorar el clima de negocios, los cuales se asocian a la necesidad de seguir aumentando la productividad y la inversión, así como la implementación de reformas estructurales para mejorar la competitividad, aumentar la flexibilidad laboral, invertir en tecnología y elevar el gasto en educación, salud y seguridad”, mencionó Recinos.
Además, enfatizó que, es necesario el fortalecimiento de la institucionalidad, así como de la certeza jurídica y reglas claras, para que las empresas, tanto nacionales como extranjeras, inviertan, se expandan, compitan e innoven, lo que contribuiría a materializar las posibilidades de generación de empleo y crecimiento económico en el largo plazo.
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