Por STAN LEHMAN
SAO PAULO
Agencia/AP
Líderes sindicales expresaron hoy su confianza de que en los próximos días pueda alcanzarse un acuerdo con los bancos brasileños para poner fin a una huelga nacional que ha ocasionado el cierre temporal de más de la mitad de las sucursales bancarias del país.
Roberto von der Osten, presidente del sindicato de trabajadores bancarios, señaló que la huelga para exigir un incremento salarial de casi 15% cumplió ayer un mes, lo que la convierte en la más larga de trabajadores de este sector en 12 años.
Los empleados también exigen planes médicos mejorados, mejores medidas de seguridad dentro de los bancos, vales de alimentos por mayor cantidad y un bono de aproximadamente 2 mil 600 dólares, aclaró Von der Osten.
La Federación Nacional Bancaria ha ofrecido un incremento salarial del 7% y un bono de unos mil 100 dólares. No respondió a una solicitud de entrevista.
Aproximadamente 350 mil de los 504 mil empleados bancarios de Brasil están en huelga, lo que ha provocado el cierre de 13 mil de las 23 mil 544 sucursales del país, comentó Von der Osten. Afirmó que aunque no están involucradas todas las sucursales, «es más que suficiente para presionar a los banqueros».
Von der Osten dijo que los grandes comercios e industrias realizan la mayoría de sus operaciones bancarias en línea, y que 54% de las transacciones bancarias de todo Brasil se efectúan por computadora o teléfono celular a través de internet. Muchas de las personas también utilizan cajeros automáticos, que no han sido afectados por la huelga, y pueden realizar los pagos de sus servicios en establecimientos de la lotería federal.
«Apenas el 8% de las operaciones bancarias del país involucran visitas personales de los clientes a las sucursales», detalló Von der Osten.
En Río de Janeiro, Martha Lopes Pontes, de 71 años de edad, hizo fila junto con otras 40 personas en una de las pocas sucursales del Banco Itau que están abiertas y con solo dos cajeros trabajando. Dijo que necesitaba realizar un depósito y efectuar algunos pagos, y que no se siente cómoda haciéndolos a través de internet.
«¿Por qué hacen esto?», preguntó. «Solo perjudican a las personas».
Grandes pancartas en blanco y rojo con la leyenda «Estamos en huelga», fueron colocadas en el sector bancario de la Avenida Paulista, uno de los centros empresariales más importantes de Sao Paulo. En el lugar sólo funcionan los cajeros automáticos.
«Se está volviendo tedioso», comentó el mecánico Jean Ribeiro afuera de una sucursal del Banco Bradesco. «Casi todos los días debo formarme durante 15 minutos para depositar cheques o hacer retiros del cajero automático y luego ir al establecimiento de la lotería a pagar mis facturas».
