San José
Agencia/dpa
El presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, advirtió ayer que su país se encuentra en «alerta roja» por su elevado déficit fiscal, que este año podría crecer hasta un 6,2 por ciento del producto interno bruto (PIB).
Solís hizo la advertencia durante una conferencia de prensa efectuada tras el tradicional Consejo de Gobierno, en momentos en que el mandatario lucha para que la Asamblea Legislativa apruebe un paquete tributario que fortalezca las arcas del fisco.
En el 2015, el déficit fiscal representó 5,9 por ciento del PIB, uno de los más altos de América Latina.
Pese a las advertencias de Solís sobre las consecuencias del elevado déficit y de la necesidad de aprobar su propuesta tributaria, la oposición, con mayoría en el Parlamento, le exige aplicar fuertes recortes en los gastos gubernamentales.
Solís calificó como «trascendental» para enfrentar el problema la aprobación de un plan fiscal que propuso su administración a la Asamblea Legislativa.
