Bea Ortiz, una de las destacadas de estos Mundiales de Budapest. Foto la hora: NACHO ESCOBAR (ESPECIAL PARA RFE / Europa Press/dpa.

MADRID
Agencia dpa / (Europa Press)

La selección española femenina de waterpolo cerró sin problemas la primera fase del Campeonato del Mundo que se está disputando en Gwangju (Corea del Sur) tras imponerse hoy por 19-6 a Cuba y ya se prepara para su duelo de cuartos de final.

España ha pasado directamente a la antesala de la lucha por las medallas del próximo domingo, «probablemente», como recordó Miki Oca, ante el ganador del duelo Holanda-Canadá, y lo ha hecho con una gran superioridad, solventando sobre todo su partido más complicado, el del debut ante Grecia, con una gran firmeza (14-4).

A partir de ahí, el seleccionador ha podido ir moviendo a sus piezas en los dos partidos teóricamente más sencillos ante Kazajistán (18-6) y ante las cubanas, ante las que no hubo atisbo de relajación hasta la llegada del descanso.

La actual subcampeona del mundo arrolló ya en el primer cuarto a su rival, incapaz de detener el ataque de las españolas, que firmaron un demoledor 7-0 en los primeros ocho minutos. Cuba, por medio de Mayelin Bernal, no estrenó su casillero hasta el inicio del segundo período, en la única concesión que hizo el combinado nacional hasta el final.

Con Bea Ortiz y Maica García “enchufadas” (4/5 cada una), España llegó al descanso con un contundente 13-1 y a partir de ahí ya bajó un tanto el ritmo, lo que permitió a las cubanas tener más opciones ofensivas e incluso poder ganar el tercer cuarto (4-3). Ya no hubo más concesiones por las de Miki Oca, que volvieron a apretar en defensa para cerrar el partido.

«Hemos tenido muy buen inicio con dos primeros cuartos muy buenos y luego a partir de ahí hemos bajado un poco. Ellas han encontrado más gol y hemos tenido más dificultades en ataque, pero hemos cerrado una primera fase bastante buena y ahora tenemos días de descanso para preparar muy bien el partido de cuartos, que será muy duro», expresó Oca tras el partido.

Oca tiene claro que deben «trabajar y mejorar cosas». «Somos conscientes de que lo hecho hasta ahora no vale nada y que empieza un nuevo torneo. Aquí todos los rivales son ya muy complicados y tenemos estos cuatro días para preparar muy bien el partido y no perder el tono de competición que hemos cogido. A partir de ahora cada partido es a vida o muerte y hay que estar mentalmente muy preparados», advirtió.

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