Nizhni Nóvgorod
DPA

Suecia derrotó hoy por 1-0 a Corea del Sur en su regreso a un Mundial de fútbol tras dos ediciones ausente y consiguió tres puntos cruciales para mantener abiertas sus esperanzas de avanzar a octavos de final en Rusia 2018.

En un partido duro e impreciso ante 42.300 espectadores en Nizhni Nóvgorod, los suecos revelaron su debilidad ofensiva tras la pérdida de Zlatan Ibrahimovic, su goleador histórico, pero un penal cobrado por el VAR y marcado por el capitán Andreas Granqvist (64′) definió el encuentro.

La victoria era clave para las esperanzas de cualquiera de las dos «cenicientas» del Grupo F, el mismo de la poderosa Alemania y de México, que sorprendió en el debut derrotando a la campeona del mundo.

Suecia llegará así a su encuentro el sábado ante Alemania con el sueño abierto, mientras que Corea del Sur jugará el mismo día con México necesitada de dos victorias: una perspectiva improbable a juzgar por el juego que mostró hoy.

Ambos equipos conocían la urgencia de ganar en un grupo más que duro, pero fueron los surcoreanos quienes salieron más enchufados. Su estrella Son Heung-min o el delantero Kim Shinwook cercaron el área sueca en el inicio, aunque sin concretar acciones de peligro.

Hubo que esperar un cuarto de hora para que el arquero Jo Hyeon-woo tocara el balón en un tibio centro llovido al área. Pero la acción cambió la dinámica y despertó a Suecia, que comenzó a encontrar la circulación ofensiva que faltaba y generó las mejores ocasiones.

Granqvist cayó en el área cuando se marchaba solo (17′), Jo tapó un mano a mano a Marcus Berg (20′) y un cabezazo de Pontus Jansson besó el palo (21′). Los coreanos perdieron además a Park Joo-ho, que se lesionó solo al intentar alcanzar un balón.

Artículo anteriorTemblor de 5.7 sacude Guatemala
Artículo siguienteVaticano y México lamentan situación de niños migrantes