Madrid/Valencia
DPA

El Barcelona perdió ayer su condición de invicto en la actual edición de la Liga española de fútbol al caer 5-4 ante el Levante en la penúltima jornada del torneo tras un encuentro llevado a los límites de la locura.

El partido fue una montaña rusa y sirvió para que el líder sumara su primera derrota después de 36 jornadas sin caer. Lo hizo en el momento más inesperado y coincidiendo con la ausencia de Lionel Messi por descanso.

El argentino recibió el día libre y se notó todo lo importante que es y el peso que tiene en el Barcelona. Tampoco fue una gran noche para jugadores como Ousmane Dembélé o Yerry Mina, entre otros. Se volverá a hablar de lo que aporta la «segunda unidad» del equipo azulgrana.

«Queríamos acabar la temporada invicta, pero eso indica todo el mérito de lo que hemos hecho. Cuando te meten cinco goles es difícil sacar algo positivo», declaró el centrocampista Carlos Busquets a «Bein Sports» al finalizar el choque.

Por supuesto, la condición de invicto era un asunto casi insignificante comparado con el mérito de ganar la Liga española. Pero la frustración con la que terminaron los jugadores del Barcelona demostró cuánto deseaban el récord de terminar el torneo sin derrotas.

El Levante fue heroico y confirmó por qué es uno de los equipos revelación de la temporada en el fútbol español. Después de flirtear más de media campaña con el descenso, su tramo final fue espectacular y lo rubricó con su brillante victoria ante el Barcelona.

El ghanés Emmanuel Boateng inauguró la cuenta a los nueve minutos de partido y el africano repitió a los 31 minutos. Dos goles que mostraron las carencias defensivas del Barcelona en su zona central.

El Barcelona descontó a los 39 minutos con el primer gol de Coutinho tras un disparo de desvió un defensa rival, pero el conjunto azulgrana pagó caro su pésimo arranque de la segunda mitad. Bardhi (46′), Boateng (50′) y de nuevo Bardhi (56′) castigaron al contraataque la pasividad azulgrana.

Entonces al Barcelona le dio un arrebato de orgullo con dos nuevos goles de Coutinho (58′ y 64′) y puso el duelo en un puño a los 66 minutos con un extraño penal anotado por Luis Suárez.

El choque era una locura y el final fue extremadamente emocionante, con un Levante defendiendo un resultado épico ante un Barcelona empeñado en mantener su condición de invicto. No lo consiguió y acabó frustrado, por más que tenga lo importante, que es la corona.

En el otro encuentro disputado hoy, el Espanyol se regaló hoy una goleada 4-1 ante el Málaga en un partido tan intrascendente como cómodo para los locales.

No había nada en juego y fue el Espanol el que más empeño puso ante un Málaga al que se le está haciendo larguísimo su tránsito hacia la segunda categoría, que es donde jugará la próxima temporada.

Gerard Moreno (7′), Sergio García (26′) y Leo Baptistao (29′) hicieron los tres primeros goles del Espanyol ante un rival que simplemente renunció a competir.

El Málaga marcó su tanto a los 39 minutos casi sin querer, producto de un penal regalado por el Espanyol y anotado por Adrián, pero el conjunto local completó su goleada a 12 minutos del final del choque con otro penal, esta vez anotado por el argentino Pablo Piatti.

De esta forma, el Espanyol escaló hacia la decimotercera posición de la Liga española con 46 puntos, mientras el Málaga continúa último con apenas 20 unidades.

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