Barcelona/Madrid
DPA

Separados por apenas cinco puntos, en rachas futbolísticas aparentemente diversas y con Lionel Messi y Antoine Griezmann en excelente forma, Barcelona y Atlético de Madrid chocarán mañana en el Camp Nou en un duelo que puede determinar el futuro de la Liga Española de Fútbol.

El partido estrella de la vigesimoséptima fecha sobreviene en el mejor momento de los rojiblancos en lo que va de campaña y justo cuando más dudas generaron los azulgrana con tres de sus seis empates acumulados en el último mes.

Para los dirigidos por Ernesto Valverde, despejarlas dependerá, en buena parte, de lo que mañana hagan en uno de los clásicos del fútbol español que más emociones regalaron en los últimos años.

«En partidos fuertes en los que nos jugábamos cosas y se nos exigía una buena puesta en escena la hemos tenido. Lo hicimos en el Wanda, ante la Juve, en Stamford Brigde, donde competimos a un gran nivel, y en el Bernabéu, que ya me olvidaba», afirmó hoy Valverde, convencido del rendimiento de su equipo, el único aún invicto en la Liga.

Con 66 unidades, los catalanes lideran con relativa comodidad un campeonato en el que llegaron a tener 11 puntos de ventaja sobre el Atlético, segundo ahora mismo con 61.

La casi impoluta actuación de los hombres de Diego Simeone en 2018 -ocho victorias y un empate- combinada con los tropiezos azulgrana -tres empates en febrero- permitieron a los rojiblancos reducir su desventaja hasta esos cinco puntos que ahora los hacen soñar.

Sin embargo, y a la espera de lo que hoy hagan los blancos en su duelo regional frente al Getafe, el Atlético aventaja a su rico vecino en diez puntos.

Sus opciones, lo sabe Simeone y todo el mundo, aumentarán si mañana el Atlético abandona el Camp Nou con los tres puntos en su cajón.

Sin considerarlo una final, el Barcelona afrontará el duelo como si lo fuera. Lo anunció su entrenador y dio los motivos: «Por la intensidad del Atlético y porque es la única manera en que nos podemos tomar un partido así».

Contará para ello Valverde con casi todos sus hombres -salvo el lesionado Semedo- y con un Messi en estado de gracia y especialmente acertado en los lanzamientos de falta.

El argentino confía en que la intensa presión defensiva de su equipo, su contraataque letal y el dulce momento que atraviesa Griezmann sean armas suficientes para combatir a un Barcelona que, en las últimas semanas, tuvo más dificultades de las habituales para anotar.

Supuestamente pretendido por el Barcelona, el delantero francés, no obstante, nunca marcó en el Camp Nou, de la misma manera que el Atlético fue incapaz de arrancar un triunfo del coliseo azulgrana en los últimos 17 enfrentamientos -11 victorias y seis empates- entre ambos equipos en todas las competiciones.

Al margen del choque estrella entre Barcelona y Atlético, el domingo también se disputarán los partidos Levante-Espanyol, Real Sociedad-Alavés y Valencia-Betis. La fecha se cerrará el lunes con el Celta-Las Palmas.

 

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