Madrid
DPA

Dos semanas después de abrir la puerta a una posible salida del Real Madrid por falta de minutos, el futbolista colombiano James Rodríguez zanjó ayer el debate sobre su futuro al asegurar que seguirá vistiendo de blanco.

«Me quedo, me quedo», dijo el mediapunta a la cadena BeinSports después de marcar dos goles en la victoria por 3-0 del Real Madrid ante el Sevilla en los octavos de final de la Copa del Rey.

«Yo ahora estoy bien. Creo que todos pasamos por malos momentos y ahora es un nuevo año y una nueva vida», indicó el colombiano en el Santiago Bernabéu después de uno de sus mejores partidos en mucho tiempo.

James, de 25 años, sorprendió el 18 de diciembre después de que el Real Madrid ganara el Mundial de Clubes en Japón al señalar que meditaba salir del club en el mercado enero.

«Yo quiero jugar más», dijo entonces James, que no disputó ni un minuto en la final del Mundial de clubes. «Yo quiero estar aquí, pero a veces no se dan las cosas. Hay que pensar bien todo y no te puedo asegurar si seguiría o no», añadió.

El futbolista pasó las Navidades entre su Colombia natal y Reino Unido antes de reincoporarse a los entrenamientos del Real Madrid días antes de Año Nuevo.

Ayer, en el primer partido del Real Madrid en 2017, el entrenador Zinedine Zidane le entregó la titularidad -el francés no especificó si fue por las bajas o por la motivación del jugador- y el colombiano respondió con dos goles y mucha entrega.

«Yo solo quiero jugar bien cuando tengo oportunidad poder hacer cosas buenas como las de hoy y poder ayudar haciendo goles o pases. Eso es lo que uno quiere», dijo a BeinSports el futbolista, que fue ovacionado por el Santiago Bernabéu cuando fue sustituido en la segunda mitad.

James abrió el marcador ante el Sevilla en el minuto 19 con un zurdazo desde fuera del área marca de la casa y sentenció el encuentro a pocos segundos del descanso al transformar un penal.

Lo celebró abriendo los brazos ante la afición y mostrando el pulgar hacia arriba, un aperitivo de su frase de la noche: «Me quedo, me quedo».

«Ha hecho un buen partido, ha trabajado, ha metido dos goles, pero más allá de los goles su trabajo ha sido importante, como el de todos los demás», lo alabó Zidane en rueda de prensa. «Me alegro por su partido».

James fichó por el Real Madrid en julio de 2014 después de explotar en el Mundial de Brasil. El colombiano le costó al club blanco 80 millones de euros (unos 83 millones de dólares al cambio actual) y firmó un contrato hasta junio de 2020.

Empezó siendo titular, pero fue perdiendo peso en el equipo y acabó convirtiéndose en un jugador secundario. De las tres finales que disputó el Real Madrid en 2016 -Liga de Campeones, Supercopa de Europa y Mundial de Clubes- James sólo jugó 47 minutos de la Supercopa.

El año 2017 arrancó de forma totalmente opuesta. Titular en un partido de alto vuelo, ante un Sevilla que llegaba en plena forma, dos goles y la promesa de que seguirá luciendo la camiseta blanca.

En el otro partido disputado ayer, la eliminatoria que mide a los dos únicos equipos de Segunda División que quedan en el torneo, Alcorcón y Córdoba empataron 0-0 y dejaron todo para el partido de vuelta.

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