Por redacción Cultura

“QUE DIOS DECIDA QUIÉN AGUANTA” fue lo que dijo el médico residente del Hospital San Juan de Dios al lidiar con el problema de la falta de oxígeno para todos los pacientes, a raíz de esta situación se sospecha que murieron dos niños por falta del mencionado gas y es en ese momento cuando el colectivo Proyecto 44 decidió intervenir al ejecutar una acción de protesta frente al Congreso de la República de Guatemala en el Centro Histórico.

“Buscamos hacer una interrogante ¿Quién tiene la culpa? al presentar estas imágenes juntas se hace evidente lo sucedido, un pequeño ataúd con dos mascarillas afuera buscan ejemplificar la magnitud de la situación precaria de la crisis hospitalaria por la cual atraviesa este país.”

La razón específica de colocar el ataúd y sus componentes frente al Congreso según manifestaron fue para dar un toque de realidad a la situación, acercarles a los diputados una realidad que no debería ser ajena ante ellos. Niños mueren en hospitales públicos y son los congresistas quienes tienen que hacer algo al respecto. Es importante mencionar que después que el Equipo de Proyecto 44 se retiró del lugar, inmediatamente personeros del hemiciclo retiraron el ataúd de las gradas y lo hicieron a un lado.

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