Por Christina Horsten e Isaac Risco
Nueva York/La Habana
Agencia/dpa

Para buscar las raíces del éxito de los músicos latinos en Estados Unidos es necesario volver hasta los años 60, cuando un joven intérprete no vidente de Puerto Rico presentó su propia versión de «Light My Fire».

Con sus arreglos de guitarra clásica y flamenco al tema del rock psicodélico de «The Doors», José Feliciano terminó entonces de abrir los ojos del público estadounidense para el talento latino. «Yo fui el primero, como Cristóbal Colón», bromeaba este año Feliciano en una entrevista con un periódico español, meses antes de celebrar los 70 años que cumple hoy.

El compositor y guitarrista puertorriqueño es desde hace décadas una leyenda viva de la música latina. Su voz potente, sus gafas oscuras y sus boleros y baladas románticas lo han hecho popular en el mundo hispano, aunque la fama universal se la debe sobre todo a un clásico navideño salido de su pluma. El tema «Feliz Navidad» del músico invidente vuelve a sonar todos los años, ya sea en Estados Unidos, Europa o Sudamérica.

«Se vuelve más grande y más grande todos los años», decía Feliciano en una entrevista con la revista «Billboard» sobre la canción que basa su éxito en un estribillo sencillo y pegajoso cantado en inglés y en español. Los dos idiomas que han marcado la biografía de su autor, que se define a sí mismo como un «americano latino».

Feliciano, nacido en 1945 como el segundo de 11 hermanos en el seno de una familia de origen humilde en Puerto Rico, llegó al mundo ciego debido a un glaucoma congénito. La ceguera, posiblemente, sólo potenció su enorme talento musical: desde los tres años acompañaba las melodías de un tío suyo con una lata de galletas, según su biografía. La armónica la aprendió a tocar de forma autodidacta.

Cuando Feliciano tenía cinco años su familia se mudó a Nueva York, al mítico barrio de Harlem. Su abuelo le regaló una guitarra, más adelante aprendió a tocar el bajo, el banyo, la mandolina y varios instrumentos de teclado. A los 17 años tuvo que dejar el colegio después de que su padre perdiera su empleo, para ayudar a su familia.

Feliciano solía tocar entonces en cafés y clubs de Greenwick Village en Nueva York, siempre melodías de flamenco, folk o pop. Los productores lo descubrieron pronto y el despegue definitivo le llegó por último con «Feliciano!», el álbum en que está su famosa versión de «Light My Fire» y temas de «The Beatles», «The Mamas & The Papas» o «Gerry and The Pacemakers», entre otras célebres bandas, cantados con su inconfundible timbre de voz hispano.

Con «Light My Fire» llegó a los charts estadounidenses en 1968, «Feliz Navidad» de 1970 se convirtió luego en su álbum más exitoso. Entre sus interpretaciones más conocidas en América Latina están «La copa rota», «Mis noches sin ti» o «Para decir adiós», así como su versión del clásico italiano «Che sera».

Feliciano ha escrito además canciones para películas y series de televisión y ha cantado junto a estrellas como Bill Withers, John Lennon, Joni Mitchell, Natalie Cole y la cubano-estadounidense Gloria Estefan.

El artista tiene una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, en 2013 ingresó también en el Salón de la Fama de Compositores Latinos de Miami, en una ceremonia en la que fue agasajado junto a Julio Iglesias y Armando Manzanero, entre otros. El puertorriqueño es considerado uno de los mejores guitarristas vivos del mundo.

A sus 70 años Feliciano sigue activo, actualmente con una gira que lo llevará en unos días a Colombia. Luego estará en Polonia y Canadá. Para fin de año, sin embargo, planea estar de regreso a la casa en la que vive con su familia en el pequeño pueblo de Weston, en el estado norteamericano de Connectitut.

El músico, casado desde 1971 con Susan y padre por partida triple, tiene previsto celebrar la Navidad en la iglesia del lugar, según su costumbre. Y allí, como todos años, volver a interpretar su tema más célebre acompañado por un coro.

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