Por DERRIK J. LANG
BURBANK, California, EE.UU.
Agencia/AP

Finalmente, «El Hombre Hormiga» está aquí.

Tras haber reunido a los Vengadores y viajado al espacio con los Guardianes de la Galaxia, Marvel Studios se dedica a un asunto mucho más pequeño. Pero llevar al diminuto superhéroe a la gran pantalla resultó más difícil que reiniciar a Iron Man, reclutar al Capitán América o dominar a Thor.

La historia de la trama para la película «Ant-Man: El Hombre Hormiga» se remonta a hace ocho años, cuando el director de «Shaun of the Dead» y «Hot Fuss» Edgar Wright y el guionista Joe Cornish se unieron para trabajar en el proyecto. Luego de haber escrito varios borradores del guion, Marvel y Wright declararon el pasado mayo antes del inicio previsto del rodaje que se habían separado «debido a diferencias en su visión».

Poco más de un año después, «Ant-Man» llega a las salas de cine el viernes para mostrar cómo el bondadoso ladrón Scott Lang (Paul Rudd) heredó el entusiasmo por la alta tecnología del científico Hank Pym (Michael Douglas). El par se une a la severa hija de Pym, Hope Van Dyne (Evangeline Lilly), para derribar al trastornado exprotegido Darren Cross (Corey Stoll).

¿Logró el estudio el «Hombre Hormiga» que quería?

«Absolutamente», dijo Kevin Feige, presidente of Marvel Studios. «Como siempre habíamos esperado, esta versión se vale por sí misma, pero firmemente dentro del universo cinemático. Hubo gente que salió de las proyecciones, mujeres en particular, que me dijeron que esta era su película favorita de Marvel. Estaban atónitas. Me imagino que es porque entraron pensando, ‘¿El Hombre Hormiga? ¿Qué es eso?»’.

Pese a haber sido un miembro fundador de los Vengadores (Avengers) en los cómics, en la cultura popular el Hombre Hormiga nunca disfrutó del mismo estatus que el Hombre Araña, el Capitán América o Hulk. Eso se debe principalmente a que el personaje no es tan carismático como Peter Parker o Tony Stark, y a que sus superpoderes son, bueno, un poco raros: se encoje, se expande y habla con insectos.

Para los realizadores, el Hombre Hormiga está justo donde debe estar.

 

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