Por JAKE COYLE
CANNES, France
Agencia/AP
«Dope» nació en los oídos de Rick Famuyiwa.
El cineasta de Los Ángeles escuchaba a Kendrick Lamar, A$AP Rocky y Tyler the Creator —músicos de R&B y hip-hop que tienden a dejarse llevar por la experimentación— y escuchó un sonido nuevo. Aunque muchos eran de partes cercanas a Los Ángeles como Inglewood, la comunidad en donde Famuyiwa creció, para nada le pareció al hombre de 41 años que eran sus contemporáneos.
«Se reunían en los mismos lugares, pero su energía era completamente diferente», dijo Famuyiwa en una entrevista el mes pasado en el Festival de Cine de Cannes. «Se sentían desinhibidos».
«Dope» es un intento de Famuyiwa de capturar a una generación negra tan diferente a «Boyz n the Hood» como lo es el frenético Lamar del gánster rap. Es una película adolescente al estilo John Hughes, vibrante y animada, sólo que en un barrio totalmente diferente.
La película, escrita y dirigida por Famuyiwa, se centra en un autoproclamado ñoño llamado Malcolm (Shameik Moore) que intenta entrar a Harvard cuando un narcotraficante en fuga (A$AP Rocky) llena su mochila de drogas. Él y sus amigos (Tony Revolori, Kiersey Clemons) cruzan Los Ángeles, con frecuencia en bici, en una aventura cómica que rompe con estereotipos.
«Estos chicos viven en un ambiente duro, pero como otros chicos, piensan en la escuela, piensan en las fiestas, piensan en una chica o chico guapo», dice Famuyiwa. «Estos chicos tienen más obstáculos a los que enfrentarse en su viaje, pero son optimistas y aceptan la vida. Creo que es una cuestión generacional».
La película tiene conexión directa con la música que la inspiró. Pharrel Williams es productor y escribió varias canciones de la banda sonora.
«Dope» causó sensación en el Festival de Cine Sundance, lo que causó una guerra de ofertas que ganó Open Road Films, que planea un estreno en grande este fin de semana. El viaje a un gran lanzamiento de verano de un éxito Sundance, con una parada en Cannes, es similar al de «Fruitvale Station» de 2013. Ambas películas comparten a Forest Whitaker como productor, quien llama a «Dope» parte de una ola cultural que señala «la universalidad de nuestras vidas y la naturaleza cosmopolita de nuestras ciudades».
«Dope» cumple con los sueños de Moore, de 20 años, un actor de Atlanta cuya audición impresionó a Famuyiwa. «Todo lo que he querido hacer se vuelve realidad», dijo Moore. «Tuve que aprender a ser actor principal. Pero cuando lo logré, fue algo impresionante».
Y mientras «Dope» causaba buenas vibras, en muchas calles de Estados Unidos se llevaban a cabo protestas causadas por asesinatos de negros desarmados a manos de policías. «Malcolm en particular, y lo que representa en cuanto a la masculinidad negra, es una contraparte a las ideas de hiperagresión, casi caricaturescas, que algunos tienen en sus mentes sobre los jóvenes negros», dice Famuyiwa.
