Por: Nhat Esteban Marcus

Pueden prescindir de por lo menos 84 premios Nobel de literatura (con mayor razón, del 100% de las loterías amañadas por mercaderes catalanes, porteños y ex chilangos).

Si quieren respirar lo nunca dicho y pensar lo nunca percibido… ahí está La Suprema Obra de Clarice.

Créanlo o no, la célebre cantante Maria Bethânia se prosternó ante ella y la proclamó: “¡Mi diosa!”.

Le crean o no, el especialista Benjamin Moser (que no parece texano) dice que: “Hoy, en Brasil, su llamativo rostro decora sellos postales. Sus obras, a menudo desestimadas durante su vida por herméticas o incomprensibles, se venden en máquinas expendedoras en las estaciones de metro. Internet hierve con cientos de miles de fans, y no transcurre un mes sin que aparezca un libro que examine un aspecto u otro de su vida y su obra”.

También pueden poner en duda lo que de ella dice el suplemento madrileño Babelia: Lispector “goza de una tremenda fama en las redes, convertida en un ícono de la autoayuda adolescente”.

Pero en un mundo a punto de aventarnos a la última guerra mundial gracias a tanto macho suelto, más vale creerles a las mujeres. Así que mejor atiendan lo que de ella dicen Laura Freixas y Fausta Gantús: Clarice Lispector es “uno de los grandes genios de la literatura de todos los tiempos” / “el conjunto de sus textos es apasionante, seductor, deslumbrante, perturbador, necesario. Tiene un poder hipnótico vital, intenso, extraordinario, que se desliza en un constante ir y venir entre lo poético y lo filosófico”.

En cuanto a Todos los cuentos, es el crítico que no parece texano quien vuelve para radicalizarnos: “Este libro no tiene precedentes. La totalidad de los cuentos de Clarice no se había reunido en un solo volumen en ningún idioma, ni siquiera en portugués. Esta obra es el registro de toda la vida de una mujer, escrito a lo largo de toda la vida de una mujer. Es, en toda su amplitud, el primer registro de este tipo en cualquier país del mundo”.

Pues sí. Pero si aún les queda alguna reticencia, váyanse enterando de que Clarice Lispector fue una de las autoras que Mario Monteforte Toledo leyó toda la vida (y miren que Don Mario escribió y leyó durante casi un siglo).

Ajá. A lo anterior, como dirían en México, agreguen este pilón: las Novelas (tomos I, II y III) de Clarice incluyen nueve obras maestras y Todos los cuentos engloban 84 piezas magistrales extraídas de siete libros. En otras palabras, algo así como ¡16 obras por el precio de sólo cuatro!

Mejor adelanto de la Feria Internacional del Libro de Guatemala, no hay.

Si aceptan el reto de adquirir la suprema obra alucinógena de Lispector… el día que vuelvan a cuestionarles si valió la pena vivir, podrán responder sin parpadear ni una vez: “Sí, leímos a Clarice Lispector y todo de pronto tuvo sentido”.

Recuerde que esta y otras novedades puede adquirirlas consultando en www.fceguatemalaenlinea.com y a través de WhatsApp: 5017-3130 o por mensaje directo en redes sociales: FCE Guatemala. El envío es gratis en compras mayores de Q200, dentro del perímetro de la Ciudad de Guatemala y Q300 en los departamentos. Aplican restricciones. Puede visitarnos en 11 calle 6-50, zona 1, de la Ciudad de Guatemala.

Memorias de un librero, de Rafael Vega Bustamante

La historia de los libros es también la historia de su distribución, las librerías y los libreros. Este libro contiene la crónica singular de quien ejerció a lo largo de su existencia un oficio cada vez más raro en nuestros días, y constituye un manual práctico para lectores, libreros, editores y humanistas sobre cómo conservar la importante tradición librera a partir de la valiosa experiencia del autor.

Diplomacia encubierta con Cuba, de William M. LeoGrande, Peter Kornbluh

Auxiliándose de la investigación de archivos clasificados estadounidenses referentes a varios episodios de diálogo entre Washington y La Habana, el estudio de diversos registros oficiales como el archivo del departamento de Estado y las entrevistas a personajes clave, como Fidel Castro y Jimmy Carter, los autores realizan un análisis político y periodístico completo sobre la historia de las relaciones diplomáticas oficiales y no oficiales entre Estados Unidos y Cuba, desde 1959 hasta la actualidad.

Barco de papel, de Jorge Luján

Una niña se baña en una tina y se entretiene con sus juguetes y sus barquitos de papel. De pronto, se anima a subirse a uno de ellos y así, surcando el océano de la imaginación, se embarca en una fabulosa aventura llena de peligros que finalmente la llevarán hasta alguien muy especial.

Artículo anteriorPelosi llega a Taiwán, crecen tensiones EE. UU.-China
Artículo siguienteLa Eurocopa femenina bate récords dentro y fuera de la cancha