Sin duda, se puede afirmar que la sorprendente pintura de Juan Bautista Navichoc Pop (Navipop), está fundamentada en un mundo de imágenes simbólicas guardadas en su imaginario cultural, proveniente de un magnífico legado mesoamericano.
Su obra, una mezcla de naturalismo y realismo, definida como arte pop, tiene esa característica “barroca” de las expresiones plásticas mesoamericanas que impulsan al espectador a observarla detenidamente, para tratar de entender el cúmulo de signos que, rítmicamente, se mueven dentro del lienzo. Las sorprendentes pinturas están expuestas en la Galería Rozas-Botrán, 16 calle 4-66 zona 14, desde hoy al 27 de agosto, 2021 de las 9 AM a las 4PM la entrada es libre.
Navipop, nombre que combina sus dos apellidos, nació en San Juan La Laguna, tierra de los tz‘utujiles, a la orilla del Lago de Atitlán. Tz‘utujil quiere decir “Flor de Milpa”. En el Memorial de Tecpán Atitlán y Anales de los kaqchikeles se menciona la existencia de esta etnia maya mucho antes de la llegada de los españoles. Tenían varias fortalezas a orillas del lago. Eran poderosos y valientes guerreros. La música es una de las expresiones culturales significativas del lugar.
La trama estética de signos y símbolos que caracteriza el trabajo de Navipop, se complementa con el uso del color. Su retina está impregnada de los colores que lo rodearon desde su nacimiento. Por eso los azules y verdes, los amarillos y los naranjas adquieren protagonismo en algunas de sus pinturas.
Juan Bautista lleva el don del arte en su ser, pero también en sus raíces. Heredó la sensibilidad artística de su abuelo paterno Aniceto Rocché, quien era músico y tuvo una marimba orquesta muy famosa, llamada Flor de la Raza. Su abuelo materno, Nicolás Pop, lo enseñó a trabajar el campo desde muy temprana edad. Pronto sintió la necesidad de migrar, en busca de nuevos horizontes.
Su primer destino fue La Antigua Guatemala. Fue vendedor ambulate de artesanías. Así, tuvo sus primeros contactos con la pintura, a través de los artistas de la Calle del Arco. Hizo amistad con muchos de ellos y aprendió conceptos básicos de los materiales que empleaban para sus obras. Navipop reconoce en ellos la generosidad que tuvieron para transmitirle estos conocimientos.
Estudió en el Liceo Antigüeño, aquí manifestó su talento musical, pero decidió ser un artista visual y optó por el Bachillerato en Artes con especialidad en Dibujo y Escultura, de la Escuela Nacional de Artes Plásticas Rafael Rodríguez Padilla. Posteriormente, obtuvo una beca para estudiar en Southwestern Academy, San Marino, California.
Aquellas manos que cultivaron la tierra, encontraron un oficio que le permite contar historias llenas de los elementos con los que creció, plasmadas con un estilo personal, que está visibilizando una nueva estética mesoamericana ante los desafíos globales que plantea la nueva era.
“La ambientación y el trasfondo cultural de Juan Bautista son trasladados a una contexto ajeno a su origen. El autor ha tenido contacto con la sociedad de consumo norteamericana y con la seducción de esa gramática pop a través de la cual sus obras en tela y en papel vibran y generan una visión híbrida y transculturizada tan vigente en el escenario visual de la
actualidad” Expresó Silvia Herrera Ubico, sobre la exposición del artista.