Imagen de archivo del Dr. Erwin Calgua. El experto abordó a profundidad la situación del COVID-19 en el país ante el incremento en los contagios. Foto: USAC

Desde hace varias semanas, el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) ha registrado un número alto de casos diarios COVID-19 superando incluso los 6 mil, atribuidos a la presencia de la variante Delta en el país y según el coordinador del Centro de Investigaciones Biomédicas de la Facultad de Medicina de la Universidad de San Carlos de Guatemala, Erwin Calgua, este comportamiento lo empezaron a notar varios meses atrás, cuando observaron cambios en las características clínicas de los pacientes.

Para entender a la variante Delta y el cambio el escenario de la pandemia en Guatemala, La Hora conversó con el epidemiólogo, quien explicó que, al revisar casos de meses previos a julio, notaban características en la sintomatología y un nivel de transmisión distinto de la enfermedad.

Calgua lo ejemplificó de la siguiente manera, ya no solo llegaban a los servicios de salud personas individuales, también los hacían grupos familiares.

Para los médicos, esto era una sospecha clínica, confirmada después con los análisis genómicos que se desarrollaron fuera del país.




AÚN FALTA ANÁLISIS

 

El experto enfatiza que sabían que no solo estaban lidiando con la variante Delta, sino también con la Gamma, aunque la primera es la que predomina.

La variante Delta del COVID-19, causó una emergencia sanitaria de gran envergadura en India, donde miles de personas sucumbieron ante la enfermedad. Posteriormente empezó a llegar a otros países y su característica de transmisión más virulenta ha hecho que los casos se eleven en donde es detectada, una situación que requiere de una respuesta: la vacunación.

Foto ilustrativa. Recientemente el Ministerio de Salud confirmó la presencia en el país de la variante Mu, de origen colombiano. Foto La Hora/Salud

A Calgua se le preguntó qué aspectos son los que han coadyuvado a que la variante se extienda con tanta rapidez por el país y respondió que hay datos que aún deben ser analizados, pero que una clave es la revisión de las fichas de vigilancia epidemiológica.

“Mirábamos anteriormente un caso, este venía como con unos once días de síntomas, ahora viene con tres días de síntomas bastante severos”, explicó.

Esto dificulta el panorama, porque las personas confían en que deben pasar más días para que sus cuadros empeoren antes de buscar ayuda.

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LAS PERSONAS NO SIGUEN LAS MEDIDAS BÁSICAS DE MITIGACIÓN

Pero ahora, considera que la transmisibilidad aumentó porque las personas no siguen las medidas básicas de mitigación, en especial el uso correcto de la mascarilla.

“A nosotros, a todos, se nos ha advertido el uso de la mascarilla, por ejemplo, que se trata de un dispositivo médico que crea una barrera que impide que las gotitas no se vayan hacia los otros lados, pero la gente se lo quito y ese es un enorme problema, la gente se lo quita en ambientes en donde considera que se encuentra bajo un nivel de protección cuando no es así”, remarcó.

MASCARILLA ES EFECTIVA, PERO SOLO SÍ SE TOMAN OTRAS MEDIDAS

El profesional agregó que incluso dentro de los hogares se debe considerar el uso de mascarilla bajo ciertas circunstancias, pero recordó que epidemiológicamente este dispositivo médico es efectivo si se han tomado otras medidas como mantener el distanciamiento apropiado con otras personas.

La variante Delta fue detectada en el país en agosto pasado a partir de ese momento se ha registrado un incremento en los contagios. Foto: La Hora

Uno de los aspectos en los que hace énfasis, son las reuniones e indicó que, sino no son esenciales, lo aconsejable es que no las realicen.

“Yo lo describo así, una reunión no esencial es aquella que no represente para usted digamos un ingreso económico real poniendo ese aspecto verdad”, remarcó.

Lamentó que muchos pacientes previo a padecer el Covid-19 estuvieron “en un cumpleaños que se fue a un restaurante que estuvo en una actividad de una boda, en un bautizo, en una actividad religiosa; esas no son actividades esenciales en un momento como estamos de alta transmisión”.

HACEN REUNIONES FAMILIARES GRANDES

En este punto, destaca que, si es una económicamente necesaria y no es sustituible, la consideraría esencial, pero recomienda usar mascarilla e incluso protección extra para los ojos.

“Pero la gente se está reuniendo y está llevando a cabo estas reuniones familiares grandes, yo miro fotos de actividades de familiares, de personas reuniéndose con sus amigos consumiendo digamos bebidas alcohólicas que en este caso desinhiben a las personas y empiezan a quitarse las mascarillas, entonces son aspectos donde la reunión lleva ciertas consecuencias”, explicó.

Por ello, reiteró la importancia de la mascarilla, que se convierte en una barrera frente a un virus “tan eficiente”, hasta en un 60% más que otros, “entonces no se requiere mucho, ni mucho tiempo tampoco de exposición”.



 

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