Gladys Monterroso

licgla@yahoo.es

Abogada y Notaria, Magister en Ciencias Económicas, Catedrática de Derecho Financiero y Tributario de la Universidad de San Carlos de Guatemala, Diploma otorgado por la Corte de Constitucionalidad en 2005, como una de las Ocho Abogadas Distinguidas en Guatemala, única vez que se dio ese reconocimiento, conferencista invitada en varias universidades de Estados Unidos. Publicación de 8 ediciones del libro Fundamentos Financieros, y 7 del libro Fundamentos Tributarios. Catedrática durante tres años en la Maestría de Derecho Tributario y Asesora de Tesis en la Facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad de San Carlos de Guatemala.

post author

Gladys Monterroso

“Cuatro características corresponden al juez: Escuchar cortésmente, responder sabiamente, ponderar prudentemente y decidir imparcialmente.” Sócrates
De cara al inicio del 2021, los abogados egresados de las diferentes universidades, al igual que los profesionales de las ciencias afines, inscritos en el CANG, tenemos más la obligación que el derecho ética y moral de presentarnos, a ejercer el voto para elegir a nuestro representante como Magistrado Titular a la Corte de Constitucionalidad.
Si bien es cierto, que esta elección es para ejercer la jurisdicción constitucional por tres meses y algo más, tiene suma importancia, por tratarse del único Magistrado que es electo democráticamente, porque lo elegimos no solamente los abogados activos, también los profesionales de otras ciencias como los politicólogos, criminalistas y más.
¿Por qué es tan importante precisamente esta elección? Porque venimos de una pandemia, que motivó que se detuvieran diversas actividades de suma importancia para la sociedad en general, es la primera elección de muchas más, que se van a presentar en las que el mayor cáncer es la abstención, viviendo en democracia, para la ciudadanía en general, la abstención debe ser considerada una grave falta, y en el gremio de abogados y ciencias afines, lo debe ser más por varias causas elementales.
El gremio, es uno de los que más incidencia tiene en la vida nacional, ya sea en la persecución penal, como representante del Estado, en la aplicación de la justicia ordinaria y constitucional, en la aplicación de las leyes, es innumerable la cantidad de actividades en las que los abogados tenemos un papel fundamental, no porque así lo decidamos, se deriva de que al vivir en un Estado de Derecho la función del abogado es primordial, derivado precisamente, de que el marco jurídico de una sociedad, sienta las bases del Contrato Social.
Por lo anteriormente expuesto, debemos dar una lección de democracia a la sociedad, no absteniéndonos en la elección que tenemos precisamente al terminar las festividades de fin de año, no podemos pedir lo que no damos, a nivel macro ¿Cómo podemos criticar al gobierno si no ejercemos el derecho al voto? Lo mismo sucede a nivel gremial, no podemos criticar las resoluciones de los Magistrados de la CC, si no elegimos a nuestro representante como la ley lo establece, es impropio de un abogado no elegir a sus representantes, más aún si se trata de un autodenominado jurista, que, aunque pocos los hay, muchos somos abogados, pocos juristas, el jurista va más allá de la lectura de las leyes.
Actualmente, tenemos cinco opciones para elegir a nuestro futuro representante ante la CC, todos abogados, analicemos los pros y contras de cada quien, recordemos que nadie es perfecto, y que para presentarse a tan alto cargo, se debe tener un camino recorrido, y todos lo tienen, no podemos quejarnos, de lo que si nos tendríamos que quejar, es de no ir a votar, porque ¿Qué solvencia moral tendríamos de analizar y criticar una resolución, si no ejercimos un deber y derecho a la vez, como lo es elegir a nuestro representante? No tendríamos justificación alguna, no es posible que no hagamos valer la democracia dentro de nuestra profesión.
Esta vez no deben haber acarreados, tampoco regalar comida, los candidatos deben dar ejemplo de ética haciendo propuestas jurídicas basadas en la Academia, que todas lo son, es una pena que no pueda haber un debate sobre jurisprudencia constitucional, mismo que debería ser la carta de presentación de cada candidato, esperaríamos uno como mínimo, aún estamos a tiempo, no sobre una materia en específico, debería ser constitucional.
Pero si no es posible, podemos indagar en internet el deber hacer de los candidatos para emitir nuestro voto, pero nunca dejar de votar, no me consideraría abogada si dejara de votar, esta votación es especial, porque como gremio debemos demostrar que nos sabemos cuidar, pero que somos garantes de la democracia, y que la aplicamos dentro de nuestra colectividad y entorno.
Un viejo refrán reza, abogado que no estudia cada día es menos abogado, yo agregaría abogado que no ejerce su derecho en democracia, no tiene derecho a criticar.
El Colegio ha habilitado todas las sedes departamentales para que la distancia no sea un elemento de excusa para dejar de votar, todos debemos hacerlo.
La justificación no debe ser un obstáculo para el ejercicio de la democracia.
licgla@yahoo.es

Artículo anteriorSuerte de cheques jugosos de Trump depende de republicanos
Artículo siguienteMagistrado “honorable” a la Corte de Constitucionalidad