En las comunicaciones es común averiguar si los mensajes están llegando apropiadamente y cuando así es se suele decir que lo comunicado llega “fuerte y claro”, para que no queden dudas o surjan malas interpretaciones. Pues así, muy fuerte y muy claro fue el mensaje que ayer envió el Subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Michael Kozak, a la Fiscal General Consuelo Porras mediante las redes sociales en el que le recuerda que tiene el deber de perseguir las denuncias legítimas de corrupción y no perseguir a los que luchan contra la corrupción, en obvia y directa alusión a los procesos administrativos que se siguen contra la FECI.
La respuesta de Porras, más tarde, se basó en el principio de la soberanía nacional y de hecho rompió lanzas con el Subsecretario de Estado al hacerle ver que él no tiene por qué meterse en asuntos de su soberana competencia, con lo que se suponía que prácticamente rotas las buenas relaciones que ella decía sostener con Estados Unidos, a Kozak le debía quedar claro que no tiene por qué andar opinando de lo que ocurre en Guatemala. Y por supuesto que de inmediato recibió el respaldo de todos los que están empeñados en afianzar el régimen de impunidad y la dictadura de la corrupción, quienes por distintos medios se rasgaron las vestiduras afirmando que el nuestro es un país soberano que puede hacer lo que le da la gana.
Olvidaron, convenientemente, las romerías que hicieron a Washington para lograr la expulsión de la CICIG y que para lograrlo convirtieron al nuestro en el remedo de un Tercer País Seguro, firmando un acuerdo migratorio que entregaba en bandeja a nuestros compatriotas que viven en Estados Unidos de manera irregular. No levantaron la voz cuando Trump amenazó con un cerco económico a Guatemala si no se prestaba a su política contra los migrantes y, lejos de eso, aplaudieron el burdo sometimiento del gobierno.
Pero el asunto no quedó allí. Para ser más contundente, hablar más fuerte y claro, el mismo Kozak volvió a las redes sociales luego del mensaje de la Fiscal para decir que la justicia independiente es un requisito previo para el Estado de Derecho y la prosperidad de Guatemala, y aludiendo a la cooptación de la justicia dijo que “un proceso transparente para colocar a los magistrados que se ajusten a la Constitución es esencial para mantener la independencia judicial”, dejando clara la postura de EE. UU. sobre lo que pasa en Guatemala. En otras palabras, le importó un pito lo que dijo la Fiscal.
