El proceso para elegir a los magistrados llega a su etapa final luego de la resolución de la Corte de Constitucionalidad que ordena al Congreso a proceder a la elección tomando en cuenta la investigación realizada por la Fiscalía Especial Contra la Impunidad del Ministerio Público en el Caso Comisiones Paralelas 2020, que se refiere a las acciones de Gustavo Alejos para coordinar de manera absoluta las designaciones mediante el manejo de los postuladores, el compromiso de los aspirantes y la coordinación de los diputados, tarea en la que participan varios miembros del Organismo Legislativo pero que dirige el secretario especializado en lectura ininteligible, Felipe Alejos.
Desde la semana pasada varios diputados empezaron a señalar que no estaban de acuerdo con el criterio de honorabilidad que plantea la resolución de la Corte de Constitucionalidad, lo que indica que ya están calentando motores para hacer una elección que, nuevamente, podrá ser impugnada por la desobediencia al criterio del tribunal constitucional de la República que claramente fijó los parámetros dentro de los que se tiene que elegir, advirtiendo también que quienes no cumplan incurrirán en responsabilidades que llegan al campo penal. Pero como la comisión de ilícitos no es algo extraño para ciertos diputados que sienten que el antejuicio les protege de manera que pueden actuar delictivamente, no es de extrañar que el preparativo largamente trabajado para concretar la designación espuria de los magistrados siga su marcha porque para los implicados en la corrupción es mucho lo que está en juego y son bastantes los que se han librado de ser ligados a proceso gracias a que tienen contactos en la Corte Suprema de Justicia que son producto del viejo sistema de cooptación de la justicia.
Obviamente la preocupación principal de los guatemaltecos en esta etapa de la historia sigue siendo el coronavirus y sus consecuencias en un país con el sistema de salud tan maltrecho y abandonado, a lo que ahora se agregan los efectos de la tormenta que cruzó por el territorio nacional. Pero la ciudadanía no debe perder de vista la elección de las Cortes porque eso marcará al país por los próximos cinco años y si se concreta en la forma en que ha sido planeada por Alejos, significa el cheque en blanco para alentar que la corrupción siga en nuestro país porque significa la certeza absoluta de que ningún pícaro tendrá que responder por sus actos ni que los ya capturados tengan que cumplir sentencias porque todo el aparato estará armado única y exclusivamente para asegurar la impunidad.
