Gladys Monterroso
licgla@yahoo.es

«Que alegre va María y que tierno es su caminar, con su cuerpo tan lleno de amor
que feliz va María»
Sergio Esquivel

El país en general es un caos, más que siempre, ya que sumado a la ingobernabilidad, la corrupción, la inexperiencia de casi el 90% de los funcionarios públicos, se suma un acto más que denota la falta de unidad, comprensión, exceso de rencor e individualismo que azotan a la sociedad guatemalteca, tan rica culturalmente, pero tan pobre humanísticamente.

Veamos, recuerdo que observé muchas veces el juego «que vendes María», no sé cuántas niñas lo jugaron y podría jurar, no lo hicieron con el ánimo de discriminar a nadie, era un juego infantil, como el de pobre huerfanita, o el patio de mi casa, donde pasaba la coja y tantos más, aquellas niñas que un día jugaron esos juegos infantiles no se imaginaron que un día, a alguien que se le llamara pobre o coja resultaría discriminatorio.

Viene a colación lo anterior, por un tema de suyo interesante, como lo es el que por tratar de demostrar que en algún momento trabajan los señores de Codisra, se ensañaran con la señorita creadora de la marca María Chula, la obligaran a pedir disculpas públicas, con el apoyo del inquilino del Palacio Nacional, ya que si, de pedir disculpas se trata, deberían ser los directivos de Codisra, quienes lo hicieran, no por no atacar al racismo, que no lo hacen, por lo menos, deberían prevenir y comprender que es el racismo.

Me indigna enormemente que nuestros magros recursos públicos se utilicen para atacar a las personas y fomentar el odio entre los guatemaltecos, veamos a nivel internacional encontramos marcas comerciales, por ejemplo en Inglaterra nos encontramos con la marca pantalones «Pepe Jeans», en ese contexto ¿Todos los José, llamados Pepe, deberían sentirse agraviados? No que se sepa.

En relación al nombre María hay familias en las que existe más de una María, por ejemplo en mi caso, tengo una amada hija que se llama María, decisión mía, y lo hice con mucho amor, antes de escribir el presente, le pregunté si se sentía ofendida, o por lo menos aludida con la marca María Chula, y me dijo que no, ¿por qué? Me preguntó, si chula es sinónimo de bonita, hasta canciones existen con mi nombre, ¿Por qué no podría existir una marca de ropa? Para mí es muy propio de nuestro país la palabra chula, y sumado a María, es un halago.

Pregunto, deberían todas las Marías del mundo sentirse ofendidas y aceptar unas disculpas públicas, por utilizar nuestros nombres, junto a un adjetivo que transmite belleza, alegría, y además ser muy chapín.

En nuestro país se utiliza ese adjetivo como una expresión de cariño, de que alguien se ve muy bien, hasta a los niños coloquialmente se les dice ¡Hay que chulo/a!, por lo anteriormente expuesto, en lo personal me niego rotundamente a que sembremos más odio del que existe en el país, dividiendo a la sociedad, cuando tenemos tantas cosas que resolver, el país se está cayendo en pedazos, gracias a las políticas de la SAT de criminalizar el adeudo tributario, un Presidente ausente, un Legislativo y Judicial altamente corrompidos, niños muriendo de desnutrición, inundados de analfabetas intelectuales, creando polémica por el nombre comercial de una joven emprendedora que a mi criterio ensalza a la mujer guatemalteca, por favor, ocupemos nuestra energía en temas más importantes, y trabajemos más para hacer crecer este país, no sigamos viviendo de la cultura del odio que tanto daño nos ha causado, durante toda nuestra historia, el odio es la regla, el amor la excepción.

Por lo anteriormente expuesto como madre de una joven de nombre María, ¿Debería plantear una demanda por discriminación contra Codisra por considerar el nombre de mi hija discriminatorio? Tomando en cuenta que yo soy la responsable que ella ostente un nombre tan bello, y del que ella como muchas mujeres más en el mundo se sienten orgullosas.

Ya no más circo y más seriedad por favor, de nosotros depende que nos sigan ninguneando por nuestras acciones y omisiones.

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