Walter Juárez Estrada
Hace unos días, el Congreso de la República, nos sorprendió con la noticia de la creación de un superministerio al Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales. La Comisión de Ambiente, Ecología y Recursos Naturales de ese organismo, dictaminó a favor de la iniciativa de Ley 6054, dándole poder y control de todas las dependencias que activa a favor del medio ambiente y recursos naturales del presupuesto de estas, el que podría ascender a la cantidad de más de Q600 millones de quetzales. Esta iniciativa de Ley, pretende, por un lado, darle poder omnipotente a dicha cartera, y así controlar y centralizar en su totalidad además de las instituciones que manejan los recursos del medio ambiente, lo que provocaría mayor control centralizado de las instituciones y provocaría mayor corrupción; cabe hacer notar que en dicho ministerio se maneja solicitudes importante de los ciudadanos y empresas que se relacionen con el medio ambiente, y que debida a su carácter discrecional lo convertirá en una súper institución.
No esta demás dejar que servirá también de adagio clientelar para el gobierno actual en la que servirá como ministerio de empleo para que el gobierno de turno pueda cumplir con sus allegados y así poder pagar favores, ya que el clientelismo político ha mermado ya lo suficiente las instituciones del estado subiendo con ello el presupuesto de la nación, ello sin olvidar que al estado de Guatemala le cuesta ejecutar el presupuesto debido no solo a la poca transparencia sino a que se maneje ese presupuesto para otro cosa que no sea el medio ambiente.
Como cosa extraña los partidos afines a gobierno, han dicho que no se encuentran de acuerdo con dicha iniciativa, y vale hacer un análisis del mismo, y no es más que por razones meramente electorales, ya que si el ministerio es creado y llega manejar esa cantidad de dinero, puede el gobierno de turno comprar voluntades y líderes, lo que le provoca una competencia directa a estas instituciones electorales; igualmente varios sectores de la sociedad civil y de las patronales no están de acuerdo ya implica que la extorción proveniente de las instituciones van estar centralizadas y por ende mejor control y va subir más la cuota que se tiene que dar, claro está en algunos casos en particular.
Con ello reafirma que este régimen, que no logra darle confianza de la población pues en realidad no se necesita esta clase de súper instituciones, siendo que en lo que verdad se necesita una transparencia en el gasto público y ejecución del presupuesto en inversión que realmente ayude a la población y la consecución del bien común. Recuerde que solo usted como ciudadano puede con su voz y acciones ser fiscalizador de la administración de la cosa pública, y por ende controlar lo que nuestros padres de la patria hacen, claro está con el interés y bendición del Presidente Giammattei.
