A 34 días de la celebración de la segunda vuelta electoral del 20 de agosto de 2023, entre el partido UNE y el MOVIMIENTO SEMILLA, con la oficialización de las 160 diputaciones que asumirán el 14 de enero del próximo año, se vislumbra la integración de la Junta Directiva, aprobación del proyecto de presupuesto 2024, y elección de cortes, MP y Contraloría.
La bancada oficialista del partido Vamos con 39 diputaciones, la UNE con 28, Movimiento Semilla, 23, Cabal 18, Viva 11, Valor-Unionista 6, y otros que suman 160 diputados en el hemiciclo legislativo, demuestra que el eventual triunfo del Movimiento Semilla al obtener la presidencia en la segunda vuelta tendrá un andamiaje oficialista legislativo en su contra.
Está claro que todas las legislaturas del congreso, incluida la actual, están en deuda con la democracia, el desarrollo y la población que los eligió. Para limpiar su actuar deberían construir un proyecto de presupuesto orientado a fortalecer el desarrollo del país con transparencia y probidad.
Sin embargo, recordamos que de aquí al 14 de enero de 2024, la bancada oficialista y sus aliados buscarán imponer iniciativas y proyectos de ley que beneficien al partido oficial y al empresariado, castigando a la población que vive en condiciones de pobreza y pobreza extrema, principalmente en el área rural.
Las acciones de judicialización en contra de la oficialización de resultados de la primera vuelta del 25 de junio, emanadas de la CC, CSJ, fiscalía, ante el cómplice silencio de la PDH, que habilitan al Movimiento Semilla a disputar la primera magistratura, generan incertidumbre que afectará la participación ciudadana. La población debe estar atenta a los ataques a la democracia con la presentación de nuevos recursos, acciones de amparo, que buscan vulnerar la certeza e institucionalidad en el congreso.
El congreso actual 2020-2024 está integrado por diputadas y diputados de 20 partidos políticos. De éstos, 16 son grupos que integran el pacto de corruptos disfrazados de partidos políticos que se han aliado entre sí y con el gobierno del partido Vamos, logrando una aplanadora autoritaria con más de 105 diputados. Esta mayoría opera contra la población honrada, aprobó leyes y medidas que favorecen la corrupción y la impunidad, debilitando la democracia y el estado de derecho, alimentando intereses particulares, limitando y retrocediendo los derechos constitucionales de la población.
La legislatura 2024-2028 debe enmendar ese mal trabajo que castigará a los guatemaltecos. De resultar electo el candidato del Movimiento Semilla, enfrentará adversarios poderosos enquistados en los poderes del estado y un empresariado explotador que destruye los recursos naturales. La próxima legislatura deberá impulsar acciones orientadas a mejorar la vida y bienestar de los guatemaltecos, crear condiciones para una economía que genere empleo, protección y regeneración de la naturaleza, lucha contra la corrupción, injusticias y violencia que asfixia el presente y ponen en peligro nuestro futuro.