Humpty Dumpty es una rima infantil tradicional de la cultura anglosajona. Esta rima son cuatro versos cortos que parecen enseñar que algo que se rompe es difícil o imposible recomponerlo.
Humpty Dumpty sat on a wall
Humpty Dumpty had a great fall
All the king’s horses and all the king’s men
Couldn’t put Humpty together again.
En la popular obra A través del espejo y lo que Alicia encontró allí de Lewis Carroll, publicada en 1871, aparece el famoso personaje representando quizá un huevo que cae y se rompe con la conclusión de que nunca podrá volver a su estado original, aunque el propio Humpty Dumpty le aclara a Alicia que su nombre es su propia forma. Sin entrar en la discusión semántica y pragmática que a Carroll le fascinaba plantear en su obra, parece que, siguiendo la forma del nombre, que son dos diminutivos cariñosos, uno para una joroba (hump) y el otro para una caída (dump), la rima podría referirse a la derrota militar del famoso e infame jorobado monarca inglés del siglo XV, Ricardo III.
Las rimas infantiles y las canciones de cuna son una parte importante de antiguas tradiciones orales que se han practicado en casi todas las culturas y comunidades humanas. Generalmente estas formas de expresión lingüística son cortas, rítmicas y aprovechan ciertas sencillas rimas. Muchas veces las mismas están acompañadas de alguna forma musical con el propósito de hacerlas más atractivas a los oídos infantiles. Se puede inducir que los propósitos de tales tradiciones son varios, entre ellos el desarrollo del lenguaje, así ayudan a crear conexiones con las creencias, conocimientos tradicionales y leyendas de la comunidad. En realidad, son quizá parte de los primeros y más importantes elementos educativos de las sociedades tradicionales, enseñándonos a todos a vivir bien.
Las rimas infantiles suelen tener una estructura que ayuda a los niños a familiarizarse con los sonidos del lenguaje y a mejorar sus habilidades de pronunciación y entonación. Asimismo, introducen al niño en las costumbres y reglas de la comunidad que el infante deberá integrar en su vida social. Sin embargo, no son simples mecanismos para la educación infantil, sino que también representan realidades políticas y económicas e incluso en ocasiones, quizás algunas de las llamadas “leyes físicas universales”, tal como la “segunda ley de la termodinámica” o el fenómeno de la entropía, en el caso del desafortunado Humpty Dumpty.
Thomas Friedman, columnista del periódico New York Times, escribió esta semana un preocupante artículo sobre lo que está sucediendo actualmente en Israel en el conflicto entre el gobierno de Netanyahu y la Suprema Corte de Justicia (Bagatz) de ese pequeño país. El gobierno y sus seguidores quieren despojar a la Corte de su capacidad de declarar anticonstitucionales ciertas leyes, estatutos y acciones resultado de la asamblea legislativa (Knesset), eliminando por estatuto legislativo el criterio de razonabilidad que le permite a la Corte controlar las acciones del gobierno y la asamblea. El próximo 12 de septiembre, la Suprema Corte israelí deberá considerar y pronunciarse sobre si la acción de Netanyahu para arrebatarle facultades a la Corte es legal, sabiendo que el gobierno ha dicho que no aceptará la decisión judicial, si es en su contra. De ser así, Israel entrará de lleno en una crisis constitucional en la que el principio básico de la convivencia social en un Estado tan diverso y fracturado puede fácilmente quebrarse, como pasa en el cuento a Humpty Dumpty, tras de su caída.
Friedman argumenta que una vez que se rompen los principios de tolerancia y respeto a los demás, el “vivir y dejar vivir”, las sociedades humanas suelen descender hacia el caos y la violencia, de lo que es difícil, si no prácticamente imposible salir, como ha sucedido en muy diversos países. Sin duda, la moraleja del cuento de Humpty Dumpty es la necesidad de actuar con mucho cuidado, cuando enfrentamos situaciones peligrosas de consecuencias irreversibles.