A pesar de que la mayoría de las comunidades y áreas pobladas del interior del país, reflejan y padecen de muchas carencias sociales, también son el lugar perfecto para que uno se relaje y se desestrese de las presiones diarias, producto de los esfuerzos que se realizan por sacar adelante, mantener a flote y lograr que nuestra empresa sea exitosa y reconocida, no siendo esta una tarea fácil, requiriéndose estar lidiando permanentemente con una competencia desleal que nos provocan los servicios públicos a precios exagerados y fuera del contexto real.
El área rural, a pesar de sus limitaciones sociales evidentes, continúa manteniendo encantos que temporalmente cambian la agenda de vida, haciendo que nos sumerjamos en condiciones sociales que ya no son muy comunes en la capital, por ejemplo: la energía eléctrica es sin duda, la base de muchas condiciones y comodidades que actualmente se tienen en las áreas urbanas del país, como ejemplo, cuando no existe energía eléctrica, como ocurrió en estos días en Izabal, me hizo pensar en el ayer que viví, con limitaciones, pero con alegría, entusiasmo y lleno de experiencias en su más viva expresión.
Es que la energía eléctrica abre paso a muchas comodidades que se han ido sumando a mi diario vivir, sin energía eléctrica no hay luz, hay que pensar y utilizar nuevamente las velas para iluminarnos, principalmente por las noches, sin la energía eléctrica, no hay posibilidades de ver televisión, pero si podemos ver la naturaleza, el firmamento y lindos paisajes que en ella existen, sin energía eléctrica no hay redes sociales y las baterías de los celulares se agotan, pero existe la gran posibilidad de establecer conversación de persona a persona, lo cual es retomar los métodos más humanizados del pasado, en donde es posible sentir la presencia de las personas, inclusive saludarle con un gran apretón de manos o un abrazo.
Sin energía eléctrica no es posible usar estufa eléctrica pero si se puede encender un fogón y cocinar con leña, lo cual es agradable y placentero, pero además, muchas personas afirman que el uso de leña le imprime otro sabor a las comidas. Sin energía eléctrica no se puede usar la radio o el aparato de sonido para escuchar música, pero a cambio de ello, resulta más agradable, escuchar el cantar de los pájaros o el sonido que produce las olas del lago o mar, o la caída del agua cuando los ríos, en su incansable caminar, buscando encontrar los mares, choca con rocas o peñas que pueden encontrarse en sus márgenes.
Sin energía eléctrica no se puede usar la licuadora y otro equipo de cocina que hoy por hoy son necesarios e indispensables, teniendo que retomar el uso de la piedra de moler, o un destripador que nos ayude en el proceso de preparar los frijoles u otros alimentos.
Finalmente observamos que sin energía eléctrica, pareciera que el tiempo se detiene y nos retorna a mucho de lo que fue nuestra vida pasada, recuerdo cuando visitábamos la finca de mi abuelito en Amatitlán, o cuando íbamos a sacar muelas a la boca costa, todo era distinto, mucho de lo que hoy se tiene como comodidad, no existía antes, pero esta ausencia de aparente comodidad, nos ponía más cerca de la realidad, lo cual nos permitía modelar un comportamiento más humano, en los tiempos actuales todo es más mecánico y adulterado, viendo cómo nuestros nietos actualmente se distraen en otros entretenimientos que limitan la posibilidad de desarrollar su capacidad motora y las habilidades de comunicación de persona a persona, pero veo que este nuevo método de comunicación, me refiero a los medios electrónicos para los cuales, se requiere destinar permanentemente importantes recursos económicos, estoy seguro que esta nueva forma de vida, con la que enfrentaremos el mundo que viene, será mejor.
Hoy la educación virtual es para todos y ya llegará el momento de que no sea solo para los que tienen recursos.
Los dirigentes de los países ya enfrentan esta revolución, que el principal problema será el fracaso de la democracia, el totalitarismo, el populismo, también sucumbirán, las religiones, nuestra manera de razonar, etc., el mundo tendrá que reorganizarse de una diferente manera, yo no sé cuál es, pero seguro que sucederá.
