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Para “quitarse” el camote de lo que denunció Edwin Escobar en su plática con Bárbara Hernández, Miguel Martínez hizo un video en el que aseguró que Manuel Conde es el único candidato que apoyan y que estará en segunda vuelta.

Es importante decir que eso que su único candidato es Conde, no es cierto porque Martínez y el oficialismo metieron las manos en muchos partidos con los que pactaron de diversas maneras.

El comentario que Conde estará en segunda vuelta encendió alarmas porque la única manera en que eso sucede es si meten las manos en los resultados y manipulan algo el día de la elección.

Debemos recordar que el oficialismo retrasó su asamblea porque intentaron buscar un candidato que no fuera a rendir tan bajo en las elecciones y ante la falta de aceptaciones, procedieron a confirmar al político que se entregó al oficialismo.

Las encuestas han dado cuenta que, aún y cuando usan los recursos del Estado para la campaña, Conde y VAMOS no han logrado levantar como esperaban. Con el dinero de todos intentaron copar 200 alcaldes y tener suficientes candidatos en distintos partidos para “gobernar” desde el Congreso.

Ya tenemos un proceso sumamente golpeado. El oficialismo ha maniobrado para incidir en la inscripción de algunos candidatos, además ha hecho pactos no visibles para la operación política, han recurrido a viejos operadores del sistema y de campañas que se ven en actividades de distintos partidos, especialmente de aquellos que han servido a los fines del oficialismo.

Han activado un entramado en redes sociales para ir tras los candidatos que no son del agrado del oficialismo y lo que menos necesitamos ahora, es que se termine de matar la democracia en Guatemala con eventos el día de la elección que le pongan la tapa al pomo a un proceso que ya tiene demasiadas manchas.

Algún día sabremos cuántos candidatos son falsos positivos del oficialismo pues tienen sus alfiles en las candidaturas a la Presidencia, el Congreso y las alcaldías más importantes que no necesariamente son aquellos que van con VAMOS y por eso es necesaria la fiscalización y observación el día de la elección porque, insisto, no podemos darnos el lujo de que se alteren las elecciones.

Los partidos que tenían “camotes” y nunca salieron a luz son uno de los indicios que nos permiten entender quiénes andan por los lares del oficialismo. Recuerde lo que denunció Escobar, pues Prosperidad Ciudadana (PC) iba a ser cancelado, pero cuando le interesó a Martínez y el oficialismo todo cambió y lo revivieron.

Los guatemaltecos debemos decidir en qué condiciones queremos llegar a las elecciones del 2027 y los ajustes que deberemos hacer para lograr ese objetivo, pues hay consenso entre varias personas y sectores que necesitamos algunos ajustes para fortalecer la democracia, así como el Estado de Derecho y ojalá atinemos a ponernos de acuerdo para lograr algo positivo.

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