Pedro Pablo Marroquín

pmarroquin@lahora.gt

Esposo, papá, abogado y periodista. ¡Si usted siempre ha querido un mejor país, este es su momento de actuar!

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Pedro Pablo Marroquín Pérez
pmarroquin@lahora.gt
@ppmp82

Vamos a ir partiendo de premisas.

En INCAE enseñan algo de forma básica: toda oferta debe tener sustento.

Estamos de acuerdo que solo inversiones sostenidas son las que sacarán adelante a este país. Los puestos de trabajo que pueden generar tales inyecciones de capital son lo único capaz de transformar una realidad para millones que piden a gritos oportunidades en su tierra. Es necesario cerrar las brechas, no expandirlas.

Guatemala más allá de lo que nos han enseñado de la marca país, tiene enormes oportunidades porque además de ser la economía más grande de Centroamérica, está ubicada en un lugar privilegiado que al día de hoy no hemos sabido explotar al máximo.

Al presidente Alejandro Giammattei y a su Centro de Gobierno una de las cosas que peor le cae es la prensa que fiscaliza con responsabilidad. No importa si en lugar de chismes son trabajos con sustento; nada vale si hay quienes, además de señalar el vicio, expresan las medidas que se puedan aplicar para corregir el rumbo.

Para él, terminan siendo chairos que afectan la consolidación de las inversiones en Guatemala.

En los próximos días, Gobierno y sector privado local e internacional están preparando un evento de inversión en Nueva York para promocionar el país e intentar atraer inversiones.

Las grandes preguntas, entre muchas que hay para darle sustento a la oferta es ¿cómo le explican a esos inversionistas el sistema de mordidas que todavía opera en el país? ¿Les dirán como parte del manual de inversión que hay que estar dentro del círculo del Jefe de Jefes para que todo camine bien? ¿Les advertirán que si enojan a Giammattei corren el riesgo que las inversiones nunca se den o se queden a medias?

¿Cómo explican la manera en la que funciona la justicia en Guatemala? ¿Les dirán que la misma es más efectiva dependiendo de los contactos que tengan? ¿Les cuentan que el Ejecutivo tiene una amiga en el Ministerio Público (MP) y que el Organismo Judicial (OJ) en mayoría tiene vasos comunicantes con el Gobierno? ¿Le explican que la Corte de Constitucionalidad (CC) ahora es manejada por Leyla Lemus, mano derecha de Alejandro Giammattei y Miguel Martínez?

Es decir, el inversionista honrado debe saber que tiene que cumplir además de lo que manda la ley, con un set de reglas “no escritas” para que las cosas operen bien, rápido y sin muchas complicaciones, pero muchas de esas personas y/o entidades no operan de esa manera.

¿Cómo explican la realidad de los puertos? ¿Cómo justifican y qué planes ofrecen para la realidad de nuestras carreteras? Seguramente miembros de Fundesa irán al evento y ellos han hecho estudios de lo tedioso que es circular en las mismas y solo Dios sabrá cómo venden y/o explican a los inversionistas la red vial que tenemos.

¿Le dirán a los inversionistas que la certificación del Aeropuerto La Aurora está en juego porque necesitamos ajustes que ya nunca se hicieron y que la mesa “técnica” que se iba a instalar para el efecto nunca se puso en marcha?

¿Le explicarán que todo el potencial que tenemos para el turismo se ve afectado porque en algunos lugares los visitantes no tienen plenas condiciones para venir a dejar sus dólares o euros?

Con autoridades viendo cómo salimos adelante y no solo cómo se perpetúan en el poder y en los negocios con el dinero de la gente, hay muchas cosas que se pueden hacer y enormes oportunidades para ofrecerle a los inversionistas.

La gente de este país es trabajadora, no se da por vencida y a pesar de todos los retos que ya viven hoy quienes invierten e invertimos en este país, aquí seguimos al píe del cañón. Es un país de gente noble que necesita ajustes para tener mayor sostenibilidad, para que se generen más oportunidades, se cierren las brechas en lugar de abrirse y se den saltos cualitativos que nos permita ofrecer Guatemala a inversionistas de primer mundo y mejores condiciones a quienes ya dieron el paso.

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