Escribo ahora desde Alemania, a la que el fascismo nazi destruyó hace casi 8 décadas, y que ahora es una democracia próspera, primer mundo, entre otras razones, porque el agua se valora, y hay enormes inversiones públicas y privadas para que llegue a cada hogar y planta de producción, sin fallarle al ambiente.
Aspiro a que las próximas generaciones en Guatemala logren el desarrollo sostenible que aquí se vive. Para ello, necesitamos ir paso a paso.
El pasado 7 de agosto, el partido UNE presentó finalmente su Plan de Gobierno. En paralelo SEMILLA presentó su plan de acción de los primeros 100 días. Para comparar el abordaje de la crisis hídrica en ambos planes, lea también esta otra columna de análisis: El Agua en el plan de gobierno de la UNE y de Movimiento SEMILLA
El Plan de Gobierno de la UNE (Vea aquí las propuestas de la UNE) se desarrolla en 6 “pilares” y una serie de propuestas priorizadas, costos, transformaciones e institucionalidad asociadas. 2 pilares incluyen explícitamente inversiones en infraestructura gris y verde del agua con un presupuesto aproximado de Q5,362 millones para el período 2024-2028 (Q1,340.5 M anuales).
La inversión en infraestructura hídrica gris por Q4,342 M (que equivale al 81% de la inversión en agua del plan), incluiría: sistemas de riego y reservorios (Q100 M: Pilar 2); recuperación y gestión de agua de lluvia, nacimientos, riachuelos, arroyos, ríos y lagos, para mejorar la calidad del agua de la población (Q2,350 M: Pilar 3); reducción de la contaminación del agua para llevar agua potable a la población y reducir la morbimortalidad infantil (Q1,592 M: Pilar 3); mejora de baños, cocinas y drenajes en 20,000 edificios escolares, que se estima en Q300 M (Pilar 3: asumiendo que se trata de un 20% de la inversión total de la propuesta).
La infraestructura hídrica verde representa un 19% de la inversión, enfocada en reforestación con énfasis en corredor seco (Q1,020 M: Pilar 2).
De manera global, las inversiones en infraestructura hídrica gris y verde del plan de gobierno SEMILLA (Q23,520 M) son 4.4 veces mayores que las del plan UNE.
Los montos de esta inversión (al igual que los que plantea SEMILLA) se sumarían al monto anual de funcionamiento del sector público relacionado con el agua (si se mantiene lo que estudiamos en 2012, esto serían unos Q1,500 M al año).
Lo hídrico dentro del qué hacer gubernamental no es fácil de comprender y son numerosas las políticas públicas vinculadas y se dispersa el esfuerzo institucional. Considero que el plan UNE no huye de la dispersión y el agua no tiene mayor visibilidad. Deberían también retomar el Gabinete del Agua que se creó cuando ellos ostentaron la Presidencia.
Por ejemplo, en el pilar 2 “Despertar económico”, se citan 10 políticas que se vinculan con lo hídrico: riego, agua potable y saneamiento, cambio climático, producción más limpia, bosques, protección y mejoramiento ambiental, etc. De allí que hay más recursos vinculados indirectamente:
- Gestión de riesgos asociados a las sequías, tormentas y huracanes: aumentar en Q500 M el presupuesto de Conred (para la respuesta a emergencias: Pilar 1).
- Q40 M para actualizar la política de expansión eléctrica territorial, que promoverá proyectos hidroeléctricos.
- Q88 M para invertir en seguros contra pérdidas de cosechas a pequeños agricultores.
La UNE presenta además, una agenda para el Organismo Legislativo, que incluiría una propuesta “Ley de Aguas (consensuada)” (sic). En esto se destaca del plan SEMILLA.
El Plan UNE atiende una parte de la crisis hídrica, en específico 6 de los 13 mayores problemas del agua que cité en mi columna anterior (identificados con los numerales 1, 4, 5, 6, 8 y 10 en dicha columna).
Este 20 de agosto nos jugamos la democracia del país. Sueñe, crea y vote por un mejor país.
Nuevamente, UNE y SEMILLA dialoguemos con mayor profundidad sobre el agua.
#Gobierno #Elecciones #Agua #Guatemala #Water Co #DrWater
(Marco Morales, El Doctor del Agua. Alemania, 14/8/2023).