Carlos Rolando Yax Medrano
Guatemala es el país que percibe mayores ingresos por remesas familiares en la región centroamericana, la mayoría provenientes de Estados Unidos. Miles de guatemaltecas y guatemaltecos han decidido irse de Guatemala porque Guatemala los tenía en el abandono. En nuestro país no se puede vivir, solo se puede sobrevivir y, aún así, las oportunidades de sobrevivencia son inexistentes para millones de personas y sus familias. Esto las ha obligado a buscarlas en otros lugares.
Por remesas familiares durante 2019, en enero fueron recibidos 688.1 millones de dólares, en febrero 690.5 millones de dólares, en marzo 826.7 millones de dólares y en abril 865.2 millones de dólares. En total, en los primeros cuatro meses del año fueron recibidos 3,070.5 millones de dólares. Hubo un aumento de 281.4 millones de dólares, es decir del 10.01%, respecto al año anterior en el mismo período.
Por remesas familiares durante 2020, en enero fueron recibidos 834.6 millones de dólares, en febrero 808.0 millones de dólares, en marzo 746.8 millones de dólares y en abril 690.8 millones de dólares. En total, en los primeros cuatro meses del año fueron recibidos 3,080.2 millones de dólares. Hubo un aumento de 9.7 millones de dólares, es decir del 0.31%, respecto al año anterior en el mismo período. Sin embargo, por la pandemia del COVID-19, los ingresos por remesas familiares disminuyeron drásticamente durante marzo y abril.
Por remesas familiares durante 2021, en enero fueron recibidos 906.8 millones de dólares, en febrero 942.9 millones de dólares, en marzo 1,285.6 millones de dólares y en abril 1,231.7 millones de dólares. En total, en los primeros cuatro meses del año fueron recibidos 4,367.0 millones de dólares. Hubo un aumento de 1,286.8 millones de dólares, es decir del 41.78%, respecto al año anterior en el mismo período.
Para este año se proyecta que Estados Unidos tenga un aumento considerable en su crecimiento económico, luego de la caída por la pandemia del COVID-19, y así se produzca un efecto rebote. Asimismo, la tasa de desempleo hispano ha disminuido cada vez más con el paso del tiempo desde abril de 2020, cuando estuvo en su punto más alto por la pandemia del COVID-19. Sin embargo, Guatemala continúa sin resolver los problemas que afectan a su población. La incapacidad del gobierno de atender las necesidades básicas de salud, educación y seguridad en el país, sigue siendo motivo para que miles de guatemaltecas y guatemaltecos intenten, cada mes más, emigrar hacia los Estados Unidos.
El crecimiento de la economía y la disminución del desempleo hispano en los Estados Unidos, junto al deterioro en las condiciones de vida en Guatemala, es una combinación que resultará en que más guatemaltecas y guatemaltecos, mayores y menores de edad, buscarán emigrar a los Estados Unidos con mayor frecuencia en los próximos meses y en los próximos años. Y esas son buenas noticias para el gobierno de Guatemala porque se traduce en menos personas a quienes garantizarles sus derechos. Al gobierno de Guatemala no le interesa disminuir la migración ilegal a los Estados Unidos. En la migración ilegal ha encontrado la mejor política de Estado.
