Por Redacción La Hora
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En respuesta a la emergencia del coronavirus COVID-19, tres profesores de la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC), junto a voluntarios que participan en el proyecto, realizaron un proceso de adaptación, rediseño y pruebas de un prototipo de respirador pulmonar, al que llamaron Respirador USAC.
El proyecto es dirigido por Rubén Velásquez, ex decano de la facultad de Química; Alfredo Tobar, vicerrector de Planificación y Fernando Cajas, profesor de ingeniería del Centro Universitario de Occidente, todos profesionales de la USAC.
La Hora conversó con el profesor Fernando Cajas, quien explicó que diseñaron el sistema de apoyo respiratorio, enfocado en la crisis del COVID-19 que en algún momento podría requerir de este tipo de equipo, según describió.
Cajas, explicó que el COVID-19, está atacando de forma diferente a otros virus y los aparatos de apoyo respiratorio convencionales, no parecen responder a las necesidades de los pacientes. Por ello, al realizar varias investigaciones, determinaron que, en algún momento, el problema no puede ser, solo la falta de respiradores, sino tener un respirador que sea adecuado para ayudar a los pacientes del coronavirus.
“No es solo cuestión de comprar respiradores o de copiar respiradores (…) empezamos a evaluar con otros colegas y tomamos la decisión de poner capital semilla, que es nuestro, no son fondos públicos e invertimos en construir 4 equipos que hicieran prototipos de sistema respiratorio”, detalló.
Según detalló, los equipos estaban distribuidos en el territorio nacional y construyeron prototipos valorados en Q10 mil cada uno; sin embargo, lograron nivelar los costos y estimar un valor de Q1 mil para cada prototipo.
“De esos cuatro, dos alcanzaron las condiciones necesarias para construir un sistema de apoyo respiratorio, que se pueda construir bajo las condiciones que atraviesa Guatemala, es decir que se pueda construir con materiales sencillos y se puedan comprar los materiales entre 4 de la mañana y 4 de la tarde y que puedan hacerse diseños con investigación científica y tecnológica, que sean de código abierto y que en otros países hayan avanzado, para no tomar uno totalmente nuevo”, detalló.
El prototipo ha sido adaptado por un equipo de científicos y técnicos, mismo que fue llamado equipo de Cánulas (high flow nasal cannula coronavirus). El otro está integrado por una máquina que usa una vejiga que empuja aire al pulmón y ha sido utilizada en hospitales de guerra.
“La cánula nasal de alto flujo (HFNC, por sus siglas en inglés) adaptada a condiciones guatemaltecas permitirán apoyar a pacientes vulnerables en los hospitales de Guatemala, en particular en los hospitales de campaña”, se detalla en la información proporcionada por los profesionales.
De acuerdo con Cajas, luego de las evaluaciones, avanzaron dos prototipos, uno de ellos fue probado por el experto neumólogo guatemalteco Edgar Beltetón, quien labora en el Hospital Herrera Llerandi. Según detalló Cajas, el respirador fue reconstruido en dicho centro asistencial, por un técnico universitario del Instituto Tecnológico Universitario Guatemala Sur (ITUGS), ubicado en Palín Escuintla.
Según el profesional, el prototipo Respirador USAC. F, fue calibrado en Casa Médica, en donde laboraron los técnicos del ITUGS en conjunto con expertos en terapia respiratoria de Casa Médica por varios días.
“Aunque el primer prototipo fue reconstruido en un hospital privado, no es para ese hospital sino es para hospitales nacionales guatemaltecos”, detalló.
Según el entrevistado, en los próximos días se iniciará con la fabricación de entre 100 o 200 prototipos de cánulas Itugs que podrán apoyar en la crisis.
“El trabajo de nosotros busca evidenciar que hay potencial y con apoyo de ciencia y tecnología se pueden hacer proyectos rápidamente”, puntualizó.
BUSCAN TRASLADAR CAPACIDADES A LAS AUTORIDADES
De acuerdo con el experto, se tiene un Consejo Médico que iniciará las conversaciones con el Ministerio de Salud para poder trasladar capacidades a la Institución, junto con las muestras que están integradas en un kit, que incluye un manual, equipo y una inducción sobre la utilización.
Cajas comentó que también se reunirán con directos del Seguro Social, para la implementación de más prototipos que puedan servir de apoyo a los pacientes afectados por el coronavirus.
“Esto nos va a ayudar mucho a ir institucionalizando el prototipo, pero aquí lo importante es el modelo de colaboración de cómo los estudiantes se comprometen con base en las necesidades reales y cómo entran a los centros hospitalarios a ser probados por neumólogos”, destacó.
Además, dijo que no buscan politizar el proyecto y aclaró que el prototipo de cánulas es limitado, pero los ayuda a pasar 3 días vivos, mientras se consigue el siguiente respirador, proyecto que también están desarrollando actualmente en Quetzaltenango.
