Por Cristian Velix
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La Sala de Femicidio separó a la jueza Susan Sabrina Salazar del caso que se abrió en contra de Juan Francisco Sandoval, jefe de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), y de Andréi González, agente fiscal de esa unidad de investigación, tras una denuncia de la candidata presidencial Sandra Torres.
Dicho proceso en contra de los fiscales se inició luego de una denuncia interpuesta por la candidata a la Presidencia por la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), situación por la que Salazar dictó medidas cautelares en contra de los investigadores y les prohibió que perturbaran o intimidaran a la presidenciable.
Para ello, la jueza dispuso que por tres meses Torres fuera auxiliada por la Policía Nacional Civil (PNC) cuando ella lo requiriera, en cualquier momento y lugar del país. Estas medidas perderán vigencia la próxima semana, no obstante, pueden ser prorrogadas.
La separación de la togada se da luego de que la Sala aceptara su excusa, ya que explicó haber sido objeto de crítica por parte de los medios de comunicación. Será la juzgadora Lisbeth Lissette Ramírez quien continuará a cargo del caso en contra de los fiscales.
Las medidas cautelares a favor de la presidenciable de la UNE se otorgaron poco después de que se conociera que el partido que la postula a la Presidencia pudo no haber reportado al Tribunal Supremo Electoral (TSE) cerca de Q20 millones utilizados para la campaña política de esa agrupación en 2015.
