Por Sonny Figueroa
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Para Rigoberta Menchú Tum, Premio Nobel de la Paz, José Efraín Ríos Montt es un “símbolo que ilustra y representa una tragedia de medio siglo que vivió Guatemala, donde se cometieron los crímenes más espeluznantes y terribles que representan un expediente de horror”.

La muerte de Ríos Montt, expresidente de facto y quien fue señalado de los delitos de genocidio y crímenes contra la humanidad, generó varias reacciones. La premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú Tum, dijo que los crímenes cometidos durante el Conflicto Armado Interno a manos de Ríos Montt están escritos en la memoria guatemalteca y que nunca serán olvidados, sobre todo porque está fundamentado en la propia justicia.

En relación a la sentencia de 80 años de prisión contra Ríos Montt por los delitos de genocidio y crímenes contra la humanidad, la cual fue anulada por la Corte de Constitucionalidad, Menchú Tum dijo que para ella la sentencia está en firme y que la condena hacia el expresidente de facto es un hecho histórico para Guatemala.

“Para mí el señor Ríos Montt fue juzgado, tiene una sentencia de 80 años. Es una vergüenza para Guatemala porque la Corte de Constitucionalidad violó la doctrina jurídica porque no permitió las impugnaciones y ese tecnicismo demuestra la impunidad en una época donde están implicados jueces y funcionarios en la corrupción. Ríos Montt sí fue juzgado, tiene una sentencia de 80 años. No fue a la prisión como producto de la impunidad, pero ante la memoria histórica él fue un personaje que compareció a los tribunales y escuchó la verdad de las víctimas”, indicó la entrevistada.

A decir de la Premio Nobel de la Paz, el deceso de Ríos Montt deja dos protagonistas: los que defienden que no hubo genocidio y las víctimas.

La muerte de Ríos Montt ilustra dos protagonistas: los victimarios que aún quieren reivindicar lo más nefasto que son los delitos contra la humanidad y las víctimas que son protagonistas de su propio expediente y de su vida y memoria. Los genocidas tienen hijos, nietos, sobrinos y primos, ojalá que ellos no sigan ese ejemplo oscuro, sin embargo, es su decisión, o estamos con la vida o contra la vida, concluyó Menchú Tum.

A decir de la defensora de los derechos humanos, aunque existan defensores de Ríos Montt no podrá revertirse el pasado.

Yo veo los hechos históricos y nadie va a revertir la historia que lleva con él –Ríos Montt–. Hay otros procesos que van a continuar ya que afortunadamente los crímenes contra la humanidad no son imprescriptibles y eso es parte de la memoria, concluyó.

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