Por Grecia Ortíz
gortiz@lahora.com.gt

Aunque las motivaciones para migrar son muchas, la corrupción está fuertemente vinculada a las causas que llevan a una persona a dejar su país. Este flagelo, junto con la impunidad, son el resultado de un sistema que privilegia el enriquecimiento ilícito de algunos, mientras que miles de guatemaltecos continúan viviendo en la pobreza y extrema pobreza.

Migrantes que residen en Estados Unidos dieron sus puntos de vista a La Hora Voz del Migrante sobre estos temas y expresaron su desconcierto ante las propuestas aprobadas en el Congreso, que favorecen la corrupción.

Desde hace quince años, Juan José Jiménez, guatemalteco residente en Maryland, decidió buscar una mejor oportunidad en otro país. Jiménez asegura que la corrupción afecta a las personas, porque siendo Guatemala un país tan rico en recursos no tendría por qué haber razones para que los connacionales se vean obligados a dejar el país.

Jiménez tiene quince años de vivir en el extranjero y aunque ha logrado sacar adelante a su familia, los extraña y le gustaría regresar.

El connacional señala que ver las noticias de Guatemala lo hacen llorar de tristeza al ver las injusticias que se cometen contra la población, “en el lugar en donde esté me dan ganas de llorar de verme aquí y ver todas las injusticias que pasan en el país”.

ESTADO NO PROPORCIONA SERVICIOS MÍNIMOS

Víctor Aresti, desde California, calificó como errónea la declaración del vicepresidente Jafeth Cabrera, quien atribuyó las razones de migración “porque así lo querían”, lo que en su opinión denota la falta de conocimiento, ya que las personas migran a otro país por necesidad, en busca de mejores oportunidades de trabajo, educación y salud.

“Las razones por las cuales se vienen –las personas– son varias, pero la mayor parte es la necesidad porque el gobierno no le proporciona lo que es necesario mínimo para el pueblo, esa es la razón por las cuales se vienen”, dijo.

La necesidad existente en Guatemala, para Aresti, es la pobreza y el hambre, “tienen hambre y la necesidad, esa es la razón –de migrar–”, indicó.

EL SISTEMA ESTÁ CORROMPIDO POR LA CORRUPCIÓN E IMPUNIDAD

De acuerdo con Marvin Otzoy, residente en Nevada, existen varios motivos por los que las personas migran, pero cree que todo tiene relación con la corrupción y la impunidad existente, porque esto no permite que los fondos destinados al desarrollo de la salud, justicia, educación, seguridad y creación de empleos, lleguen a donde corresponde.

“La gente no tiene salud, no encuentra justicia, no tiene cómo alimentar a la familia, no les queda otra más que buscar en dónde están esas oportunidades, buscar donde poder ellos tener ellos un empleo para tener un empleo para poder sostener a la familia y poder proveer esas necesidades básicas del ser humano”, dijo.

Pero no solo son guatemaltecos con sus familias los que migran, también lo hacen los jóvenes que no encuentran oportunidades de empleo y no ven un futuro en Guatemala, por lo que deciden buscar nuevos horizontes.

Es por eso que Otzoy considera que el sistema está corrompido por la corrupción e impunidad y no queda otra alternativa ni solución más que salir del país.

“Se necesita una reestructuración del sistema de todo el sistema del Estado en donde puedan crear esas oportunidades laborales a través de la inversión, de trabajo en construir hospitales para emplear a más gente, tanto para los que están construyendo, como los que van a atender o dar servicios”, señaló.

El guatemalteco es trabajador, pero en Guatemala no les dan esas oportunidades para poder laborar, indica.

LA POLÍTICA Y SISTEMA MARGINAN A LA POBLACIÓN

Para Mynor Aguirre, de la Asociación Primaveral, es la política y el sistema lo que margina a la población, razón por la que los connacionales deciden irse. Como prueba menciona las leyes aprobadas recientemente en el Congreso que favorecen la corrupción.

Según Aguirre, ahora ya no solo se puede ver a la clase política hacer de las suyas con temas como plazas fantasma, porque este comportamiento ya parece ser una forma de actuar normal.

“Si tratamos de pedir un crédito para abrir un negocio no hay oportunidad ¿por qué?, por la inseguridad misma… lamentablemente hay muchas consecuencias por las cuales tenemos que migrar de nuestro país, una de ellas son las razones económicas, la falta de empleo, oportunidad, inseguridad. Ya sabemos que hasta en el mismo Congreso existe este tipo de mafias que vienen a querer aprobar la corrupción para poder dejar libre a cuanto delincuente está en las cárceles”, indicó.

CUANDO EXISTE CORRUPCIÓN NO HAY POSIBILIDAD QUE EXISTA SALUD, DESARROLLO Y EDUCACIÓN

El profesor Carlos Díaz, residente en México, explicó que Guatemala atraviesa por conflictos, por los que los guatemaltecos optan por un éxodo masivo de niños, jóvenes y mujeres buscando un futuro porque en Guatemala no lo hay, a consecuencia de funcionarios que no trabajan a favor del pueblo.

“Los guatemaltecos salen huyendo del país, buscando horizonte más allá de las fronteras, en México tenemos gran migración de guatemaltecos que están viviendo aquí y han hecho otra nueva vida”, expresó.

Cuando existe corrupción, no hay posibilidad que exista salud, desarrollo y educación, además que la impunidad lleva a que la justicia se venda por monedas, opinó Guillermo Castillo, connacional residente en Kentucky e integrante de la Cooperación Migrante.

Para Castillo, el sistema es el responsable en gran parte de que la migración se mantenga, “la impunidad lleva a que la justicia se venda por monedas o crear leyes para protegerse de corruptos”.

POLÍTICOS NO RINDEN CUENTAS

A decir de Juan Carlos Pocasangre, es lamentable que debido al sistema corrupto de Guatemala, los ciudadanos decidan dejar el país y a sus familias y migren, principalmente a Estados Unidos.

Para Pocasangre, la economía en Guatemala se ve muy afectada, porque el dinero que tendría que llegar a beneficio del pueblo no llega a donde corresponde.

“El pueblo no tiene un trabajo digno, una entrada de dinero para sus hogares, sino tienen eso no tienen buena alimentación… no tienen buena salud, no tienen seguridad, allá últimamente los extorsionistas, las maras, hacen lo que quieren con el pueblo y no hay quién los defienda, entonces básicamente es una desesperación si uno no puede llevar el pan de cada día a la mesa de su casa, porque no hay trabajo, no hay salud, y uno tiene que migrar”, dijo.

El problema parece no tener fin, porque los recursos les quedan a políticos “corruptos” que no le entregan cuentas al pueblo, indica.

CORRUPCIÓN GENERA DESEMPLEO E INESTABILIDAD

En tanto, Carlos Ramírez, de Nueva York, señaló que un ejemplo por el que los guatemaltecos deciden migrar pueden ser acciones como las del Congreso y de los diputados que hacen y pasan leyes sin leerlas ni pensar si son a favor de la población, lo que al final crea una problemática de estabilidad y de exclusión.

“El problema es el sistema de cómo elegimos los diputados que son por bancada y no por individuo, la cantidad de diputados que es exagerada, son 158 para un país tan pequeño, pero eso es solo Guatemala que le gusta darle su dinero a los políticos, si los legisladores hacen las leyes la justicia está limitada, la seguridad es otra obligación del Estado y no nos la da, la salud está tan lejos, deberíamos estar listos para la prevención”, afirmó.

De las instituciones como el Organismo Legislativo, el migrante señaló que se pueden rescatar algunos perfiles, y en el caso del Ejecutivo, considera que el presidente Jimmy Morales, es el responsable de todo lo que está pasando ahora en Guatemala.

“La corrupción va a debilitar las instituciones del Estado, ¿y qué pasa?, se genera desempleo y eso genera delincuencia, inseguridad y como no hay un buen sistema de justicia porque los legisladores hacen las leyes, Guatemala se hunde y no tenemos esperanza, nos hace migrar… no creo que alguien lo haga porque quiere como dice el vicepresidente”, apuntó.

FREDY MUÑOZ: LAS POLÍTICAS PÚBLICAS SIGUEN SIENDO POBRES

Para Fredy Muñoz, de Maryland, está claro que la corrupción que ha existido en los últimos gobiernos se ha complicado y es responsable de que existan menos oportunidades de desarrollo económico, educativo, seguridad, pobreza y da como resultado la nulidad de cambios del sistema.

“No ha habido cambios del sistema, las políticas públicas siguen siendo pobres y no cumplen con su cometido, entonces la inversión social es mínima, a veces nula… no hay inversión, la ayuda que tiene que llegar a las comunidades no llega porque se gasta en personal, en logística, un montón de cosas que no llevan ningún beneficio al país”, indicó.

Otro aspecto que afecta a los guatemaltecos que deciden retornar a Guatemala, según Muñoz, es la inseguridad porque ha conocido a algunos que regresan y al poner sus negocios los extorsionan y como no hay acciones al final deciden huir a otro lado.

Muñoz agregó que es por todo este antecedente que los políticos y autoridades deben informarse de la problemática nacional.

“Incluso el vicepresidente acaba de dar declaraciones, diciendo que los migrantes se van porque quieren, pero ¿Qué van a ofrecer en Guatemala?, nunca nos han ofrecido una oportunidad, nunca hemos recibido un quetzal de parte del Gobierno a pesar de que hay recursos para eso. O sea ellos están equivocados en sus políticas, inversión social, no hay apoyo de parte de las instituciones de Gobierno”, añadió.

LAS PETICIONES DE REFORMAS EN 2015

Desde 2015, el Ministerio Público (MP) y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) han presentado no menos de 25 casos de corrupción vinculados a instituciones del Estado.

La Línea, Cooptación del Estado, Cooperacha, Corrupción y Construcción: Los Negocios del Micivi, IGSS-Pisa, Negociantes de la Salud, Lavado y Política, Caso Lago de Amatitlán, Botín en el Registro de la Propiedad, Lago de Amatitlán, Cooptación del Estado y TCQ son algunos de los casos que figuran en la lista y todos con nombres de reconocidos exfuncionarios que ahora atraviesan procesos judiciales, algunos de ellos estancados en las instancias judiciales.

Hace dos años, la ciudadanía se volcó a las calles en manifestaciones exigiendo la renuncia del entonces presidente Otto Pérez Molina y la exvicepresidenta Roxana Baldetti, pidiendo una reforma profunda del sistema.

No obstante, aunque se realizaron cambios a la Ley Electoral y de Partidos Políticos, la propuesta aún no termina de convencer y se ha planteado una segunda propuesta de cara al proceso electoral de 2019.

Para el jefe de la CICIG, Iván Velásquez, esta ley y su fortalecimiento es de vital importancia e incluso califica al financiamiento electoral ilícito como el pecado original de la democracia.

APRUEBAN CAMBIOS A FAVOR DE LA CORRUPCIÓN, PERO NO DE LA JUSTICIA

A diferencia de la rapidez con que se aprobaron las reformas al Código Penal, del llamado Pacto de Corruptos, en el que se modificaba la responsabilidad de los Secretarios Generales de los Partidos Políticos, y se ampliaba la conmutación de Penas de 5 a 10 años que fueron aprobadas por 107 diputados, las reformas constitucionales del sector justicia no contaron con la misma suerte.

Aunque dicha propuesta contaba con el acompañamiento de la Secretaría Técnica del Diálogo Nacional integrada por la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH), la CICIG y el MP, el proyecto que fue convocado por los Presidentes de los tres poderes del Estado quedó estancado en el Congreso.

En comparación, los votos para las reformas del llamado “Pacto de Corruptos” fueron alcanzados en menos de un minuto con una mayoría de 107 diputados.

DEPORTACIONES CONTINÚAN

De acuerdo con registros de la Dirección General de Migración (DGM), en los últimos tres años más de 170 mil personas han sido deportadas por la vía terrestre y aérea de México y Estados Unidos, quienes en busca de un futuro mejor decidieron dejar a sus familias, y retornaron de nuevo a un país que sin reformas no ha logrado avanzar y no puede ofrecer mejores oportunidades a las familias.

Según la DGM, de 2015 a agosto de 2017, un total de 104 mil 444 personas fueron deportadas de México vía terrestre, mientras los retornados por la vía aérea de Estados Unidos hasta el 1 de septiembre de este año, fueron 68 mil 486 los guatemaltecos que regresaron al país.

DEJAN EL PAÍS EN BUSCA DE UN REFUGIO ECONÓMICO

Bryan Paredes, del Colectivo Guatemalteco-Americano Migrante Organizado, que promovió protestas afuera de la sede de la ONU el pasado 19 de septiembre, advirtió que no es posible que se le permita al gobierno de Jimmy Morales convertir al país en un “Viejo Oeste donde la anarquía impera y hace que muchos connacionales dejen el país en busca de un refugio económico y de oportunidades en tierras ajenas”.

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