Por Denis Aguilar
daguilar@lahora.com.gt

Luego de que ayer el Ministerio Público (MP) y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) anunciaran acciones contra diputados de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) y del desaparecido Libertad Democrática Renovada (Lider), analistas consideran que existe un colapso en los partidos políticos y que las reglas electorales deben cambiar.

Consultado al respecto, el analista independiente Renzo Rosal indicó que se necesitan cambios en la reglas electorales, entre esos están las reformas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos (LEPP), además de realizar cambios en otras leyes para que se mejoren los controles.

“En el corto-mediano plazo la línea fundamental es fortalecer los controles, la supervisión, la investigación de las diversas formas de financiamiento y por supuesto la mayor capacidad sancionatoria”, indicó. “Las modalidades de financiamiento electoral se han vuelto cada vez más sofisticadas”, agregó.

Para Rosal, en un mediano-largo plazo se deben dar cambios en la LEPP, pero también considera que debe fortalecer el Código Penal para incrementar las figuras jurídicas que penalicen las acciones relacionadas al financiamiento ilícito electoral.

SE DEBEN MEJORAR CONTROLES
Por su parte, Helen Mack, directora de la Fundación Myrna Mack, considera que los partidos políticos viven inmersos en un colapso y una podredumbre debido a que se han dado casos en que estos han sido financiados por grupos del crimen organizado y del narcotráfico y los vinculó con los casos de plazas fantasma.

“A través de plazas fantasma se aprovechan muchos, por eso no les interesa el tema de la Ley de Servicio Civil, de la meritocracia, porque ellos quieren seguir dando plazas fantasma a su gente”, indicó Mack.

Para Mack, no es suficiente con unas reformas a la Ley Electoral debido a que los mismos partidos políticos seguirían con sus cuotas de poder, por lo que considera que se deben tener otra clase de controles, en los que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) pueda ejercer una mejor fiscalización sobre estas agrupaciones.

DEBILIDAD INSTITUCIONAL
A decir de Mario Polanco, del Grupo de Apoyo Mutuo (GAM), casos en los que están involucrados partidos políticos se deben a que en Guatemala existe una debilidad institucional, específicamente en materia electoral.

Polanco argumenta que el sistema democrático en Guatemala es joven y que esta es una de las causas del colapso en las agrupaciones políticas.

“Nuestro sistema tiene unos 33 años, entonces siendo joven todavía estamos aprendiendo la forma en que debe realizarse todo proceso electoral”, anotó.

El entrevistado considera que es sano que se den investigaciones contra partidos políticos, ya que esto permitirá que haya más entidades políticas fuertes. Agregó que se debe establecer mecanismos en donde el financiamiento electoral ya no sea oscuro.

Ayer el comisionado Iván Velásquez dijo que el financiamiento electoral ilícito es el pecado original de la democracia en Guatemala, aseveración que los analistas comparten.

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