POR GRECIA ORTÍZ
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El drama de una familia originaria de Joyabaj, Quiché, hizo que la maestra del pequeño Jesús Alberto Ralios Gabriel, buscara el apoyo de héroes que quieran colaborar para ayudar con una noble causa.

_2El pequeño Alberto siempre se ha caracterizado por ser un estudiante puntual y responsable, relata Chatia Ogaldez, maestra de educación primaria de Joyabaj, Quiché; por lo que cuando nadie llegó a traer su tarjeta de calificaciones comenzó a sospechar que algo andaba mal en el hogar del niño.

La familia del pequeño siempre se preocupaba por su educación. “Tienen mucha responsabilidad al mandarlo a la escuela, él siempre llega”, aseguró Ogaldez.

Un día, la maestra decidió preguntar a Alberto si todo estaba bien. “Me di cuenta lo que pasaba porque yo le pregunte a él por qué su mamá no había firmado, porque ella es muy responsable y me asombró que no haya llegado. Pero entonces el niño me respondió que su papá aún estaba hospitalizado por un accidente que fue en enero. Él tiene una llaga y lo tienen que operar”, refirió.

El padre del menor trabajaba como albañil y durante la construcción de una vivienda cayó de una terraza. La caída le provocó graves lesiones y como consecuencia tiene parálisis de los miembros inferiores.

El padre se encuentra internado en el Hospital General San Juan de Dios y la madre del pequeño debe viajar constantemente, por lo que los hijos mayores cuidan de los cuatro más pequeños.

“El mayor de edad está a cargo de ellos, pero le cuesta, en lo que los niños están en la escuela él va a ganar algo de dinero. También hay otros dos, entre ellos una señorita, que también ayudan”, explicó la maestra.

Cuando, entre lágrimas, el niño le contó lo que sucedía, la maestra se conmovió ante la situación. “Me sentí muy triste porque pensé en que no lo había visto sonreír. Ellos tienen mucha tristeza por lo que les pasa”, dijo.

Luego, uno de los compañeros de Alberto le comentó que no había comido: “me dijo que no tenían comida y que solo agua pura había desayunado”, relató, por lo que la maestra decidió que era hora de hacer algo por ellos y comenzó por pedir víveres a conocidos.

A pesar de que Ogaldez publicó la historia del pequeño en la red social Facebook, el apoyo que han recibido es muy poco. “Han respondido de la cabecera del Quiché, pero son contados en mi pueblo”, lamentó la profesora.

Ante esa falta de respuesta decidió pedir apoyo a los Bomberos Voluntarios del lugar, para que divulgaran la información.

“Salí en la ambulancia a pedir apoyo, para hacer un llamado a la población para que se acerquen”, aseveró.

Según aprendió Olgadez, las redes sociales son útiles para edificar, pero también para destruir. “Me gustaría que la familia recibiera muchos víveres para comer, así también para tener una tiendecita. No tienen recursos, ninguno es profesional, son personas que no han tenido los recursos para estudiar”, dijo.

Ogaldez destacó que el papel del maestro no se limita a las aulas educativas, porque en muchos casos deben tomar responsabilidades para ayudar a sus alumnos. “Uno mira sus caritas inocentes, sin saber cómo va ese niño. Me dio mucha tristeza porque tenemos tantas oportunidades de ayudar a las personas en su sufrimiento”, comentó.

La entrevistada reconoció que siente admiración por la familia de Alberto, ya que a pesar de sus dificultades no han permitido que el niño deje los estudios y buscan formas dignas de ganar dinero. “La casa que tienen la deben al banco. Los hermanos luchan por llevar comida pero lo hacen honradamente, los niños no faltan a la escuela y la señora es muy responsable, siempre cumplen con lo que uno les pide a pesar de lo que les pasa”, dijo.

Alberto también recibe la ayuda de sus compañeros, pues padres de familia se han solidarizado con su situación al proveerles víveres. “Agradezco a mis alumnos y a los padres de familia por su donativo, sé que esta es la máxima prueba de amor y solidaridad”, señaló la maestra.

ESPERAN MÁS AYUDA

Ogaldez espera que más personas decidan apoyar el caso del pequeño Alberto. Si usted desea información puede comunicarse al teléfono 5694-4672.

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