POR MANUEL RODRÍGUEZ
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Ante la propuesta de la Comisión de Finanzas Públicas y Moneda del Congreso de reducir a Q52 millardos el techo del proyecto de Presupuesto General de la Nación para 2016, el ministro de Educación, Rubén Alfonso Ramírez, declaró que recorte tan significativo “sería lamentable” porque hay gastos que ya se tienen contemplados el año entrante y se estaría afectando el impulso de algunos programas en la cartera, como la refacción escolar.
“Ruego a los diputados que piensen bien sus decisiones porque Guatemala necesita ese dinero. Ellos ahora están sujetos a los ojos del pueblo y tienen que comprender que eso no se trata de un aspecto político sino una necesidad social. Si se da un recorte de esta naturaleza, lógicamente algunos programas no podrán continuar y algunos se tendrán que reducir. Lo cual no es justo”, acotó el profesor.
El académico, además, recomendó a las próximas autoridades educativas promover el civismo, invertir más recursos en infraestructura para el nivel primario y secundario y garantizar que todos los establecimientos del sector oficial cuenten con personal completo “porque no se puede trabajar sin maestros”.
“Lo importante es que todas las escuelas cuenten con profesores y ese sería uno de los requerimientos principales que se dejarían de cumplir si ese dinero no llega a las arcas del Estado. Hay muchas otras cosas que deberían ser prioridades y ojalá que el nuevo ministro que llegue el año entrante, tenga en sus manos un proyecto de desarrollo de programas y los recursos necesarios”, añadió Ramírez.
La Comisión legislativa anunció que emitirá su dictamen después que se conozca al binomio presidencial electo el próximo 25 de octubre.
